Barranco de Wadi Mujib y Monte Nebo (día 12: 27-7-22, miércoles)
Hoy hicimos un cambio de planes sobre la marcha, por segunda vez en nuestro viaje. Es la primer vez que nos pasa que cambiamos el itinerario, y por partida doble.
Para hoy nos tocaban 3 caminatas en Dana, lo que sería pasar todo el día al sol. Pero estamos un poco chamuscados, tampoco mucho, pero en previsión de no acabar peor, y que ya hemos hecho muchas caminatas, tanto en Petra como en el Desierto, hemos pensado que, con estos calores, mejor descartarlo y hacer el resto de viaje un poco más desahogados.
Anoche escribí a mi alojamiento de Dana para decirle que estábamos quemados y que no íbamos a caminar por Dana, si nos podía cancelar gratis, porque ya estábamos fuera de plazo. Y nos dijo que sí, que sin problema. Que amable!! El barranco, con agua y sombra, nos vendrá muy bien para recuperarnos.
Así que ponemos rumbo a Wadi Mujib y, para dormir, lo haremos de nuevo en Madaba, que es la localidad que está más cerca del Mar Muerto, donde tenemos el alojamiento ya pagado para mañana. No hay otra alternativa, pero ya nos parece bien, así compraremos más souvenirs.
Tenemos unas 2 horas y media de camino, unos 170km. Las carreteras están bien, pero por aquello de los badenes, que no sabes nunca donde te los vas a encontrar, tampoco se puede correr excesivamente.
Llegamos al barranco como a las 9.45h. Asegúrate de tener bien marcada la ubicación.
WADI MUJIB
Esta es la web oficial.
Precio: 21 JOD
Wadi Mujib es la reserva natural con menor altitud del mundo, se encuentra a 410 metros por debajo del nivel del mar y muy cerca del Mar Muerto.
Esta reserva fue creada para la cría en cautividad del íbice de Nubia, una subespecie de la cabra salvaje de los Alpes y que habita en los acantilados de arenisca de Mujib. Al encontrarse en el profundo cañón de Wadi Mujib, la reserva posee una variación en su elevación de 1.300 metros que, junto con el agua proveniente de los siete afluentes del río Mujib, ha favorecido la creación de una asombrosa biodiversidad en la zona.
Debido a la abundancia de agua de la reserva, se puede caminar, escalar o recorrer a nado el cañón de Wadi Mujib. Además, el recorrido por este impresionante cañón es considerado una de las mejores aventuras acuáticas que se pueden hacer en Jordania ya que, al final del trayecto, el maravilloso paisaje formado por acantilados y laderas, revela un asombroso estanque con una cascada espectacular.
Logística en Wadi Mujib:
- Para el acceso hay que buscar el Wadi Mujib Adventure Center en Google Maps, o el Wadi Mujib Bridge. Está al lado de la carretera del Mar Muerto. La entrada pasa muy desapercibida, hay que estar atento o es muy fácil saltársela. No hay ni una sola indicación en todo el camino.
- Abre de abril a octubre, según el caudal del agua, así que en estos meses, asegurarse a través de la web oficial si está abierto o no. Los fines de semana (incluidos viernes) dicen que hay mucha gente. Se recomienda llegar antes de las 9. Hay quien ha llegado como a las 10.30h, hay lista de espera y tras 2h de espera, 13 personas delante, se ha ido sin hacerlo. Nosotros en julio llegamos a las 9.45h y en el aparcamiento había una docena de coches, pero no parecía masificado, ni mucho menos y entramos sin problemas.
- La ruta que hacemos es el Siq Trail, que es auto guiada. Antes parece que se podía contratar guía pero esto ha cambiado.
- Calzado: El calzado se va a mojar, así que uno con el que te sientas cómodo. Pueden ser escarpines, yo siempre voy con mis romanas de agua, hay quien va con bambas y luego ya se secarán. Pero es importante que no resbalen, pues hay tramos que resbalan mucho y que, con la fuerza del agua, cuesta encontrar un punto de apoyo.
- Ropa: también se va a mojar, así que como te sientas mejor. Nosotros llevábamos los bañadores debajo, pero encima camiseta de manga corta y leggins largos. Yo incluso me fui con los calcetines puestos, debajo de las romanas, y lo agradecí, porque el pie no resbalaba nada. La ropa larga te evitará rozaduras. Es fácil que te golpees con alguna piedra y te rasques, pero nosotros de aquí nos íbamos al mar Muerto, y no nos podíamos permitir ningún rasguño. Y lo conseguimos!! No me llevé guantes de bici, que recomendaban, pero creo que no hacen falta.
- Qué llevar a Wadi Mujib: Hay que dejar TODO en el coche. Dentro del recinto solo te guardan la llave del coche, nada más. Nosotros solo nos llevamos la GoPro y un teléfono dentro de una funda protectora para agua.
- Con todo guardado en el coche, entramos en recepción. Una vez dentro, hay que registrarse. No nos pidieron el pasaporte, como habíamos leído. Después solo hay que pagar y listos. Curiosamente, nadie a la salida controla que hayas salido. Incluso nos cogimos nosotros mismos la llave del coche del estante. En fin…
- También te dan un chaleco salvavidas, que es obligatorio llevar. Había leído que también hay que coger casco, pero no fue el caso.
- Duración del recorrido: 2-3 horas ida y vuelta. Nosotros nos recreamos y tardamos más de 3 horas, porque disfrutamos el camino de vuelta. Aquí también hay pececitos Rufus, de los que comen pieles muertas, y fue una gozada porque nos dejamos llevar por la corriente, tranquilamente, incluso repetimos tramos. Lo disfrutamos al máximo. Y la temperatura del agua no pudo ser más ideal.
- Cuando acaba el recorrido, el parquing es un cambiador al aire libre, porque dentro no hay vestuarios.
Ruta Siq en Wadi Mujib
Con el chaleco puesto, sólo hay que entrar en el camino. Cuando vi las escaleras de bajada al cañón pensé que dónde me había metido.
Cuando bajamos a tierra, ya nos encontramos con la inmensidad del cañón. Es como estar en el Siq de Petra, pero con agua. La primera parte es tranquila. El agua cubre solo hasta las rodillas y no tiene mucha fuerza. El paraje es espectacular. No os olvidéis de mirar hacia arriba. El reflejo de la luz, los colores y las formas de la roca lo convierten en algo fascinante.
Una vez te adentras en el cañón, el agua cada vez tiene más fuerza y empieza a cubrir más. Para ir vas contra corriente. Al volver tienes la corriente a tu favor… Nosotros por aquí fuimos usando el móvil para hacer alguna foto. Ya más adelante tuvimos que guardarlo en la bolsa hermética puesto que el nivel del agua iba subiendo y de vez en cuando lo íbamos sacando y guardando.
El sistema de cuerdas te ayuda a soportar la corriente y a hacer el recorrido.
Es un recorrido más o menos fácil, pero diría que hay 3 o 4 puntos delicados, y aún más a la vuelta. Nosotros llegamos hasta el final, pero vimos alguna chica joven, con sobrepeso, que no se vio capaz de seguir y se quedaron por el camino. Es cuestión de encontrar tu punto de apoyo, a veces no lo es el pie y hay que ayudarse con los brazos, porque la piedra resbala y la corriente se te lleva, hay que ir tanteando. De todas formas, no lo veo apto para todo el mundo, creo que hay que tener un mínimo de forma física. No vimos niños ni adolescentes durante nuestro recorrido, no se si hay un mínimo de edad.
Cuando llegas al final te encontrarás la cascada, bajo la que también te puedes meter, mejor por el lateral que de frente, menos fuerza ejercerá el agua. Y en este punto creo que tardamos 1 hora en llegar. Nos encantó muchísimo hacer el barranco. Se ha convertido en nuestros TOP de Jordania. Nos lo pasamos muy bien todo el recorrido. Creo que éramos los más maduritos…
Al regresar, hazte el muerto y déjate llevar por la corriente mirando hacia el cielo y disfrutando del masaje que te harán los pececitos rufus. Los puntos difíciles de subida, lo son un poco más de bajada porque ahora el agua te arrastra, pero nada insalvable. Y el tramo de vuelta lo disfrutamos un montonazo recreándonos y recargando pilas con esa buena temperatura que teníamos en el agua y refrescando nuestra piel.
Acabamos hacia las 13.30h. A la salida, chalecos fuera, nadie controló que saliéramos y nos cambiamos en el coche. Estábamos frescos como una rosa y con una energía increíble. Nos comimos unos gofres que nos sobraron de ayer y que con el sol estaban calentitos, así que teníamos gasolina para seguir ruta.
Y pusimos rumbo al Monte Nebo, que teníamos a unos 55km, 1 hora aprox, y que estaba de camino de Madaba, que era donde íbamos a hacer noche.
MONTE NEBO
Precio: 3 JOD, no incluido en la Jordan Pass.
Este es el lugar en el que está enterrado Moisés y el lugar santo más venerado en Jordania. Una vez en la cima, se puede contemplar el vasto paisaje compuesto por el valle del río Jordán, el mar Muerto, Jericó y Jerusalén, al que se hace referencia a menudo como la Tierra Santa.
Sigue siendo lugar de peregrinación de los primeros cristianos; la primera iglesia del monte Nebo se construyó a finales del siglo IV para señalar el lugar en el que murió Moisés.
Se han encontrado seis tumbas, de diferentes períodos, excavadas en las rocas situadas debajo del suelo del mosaico de la iglesia. En el presbiterio actual se pueden observar restos de mosaicos; el más antiguo es un panel con una cruz trenzada.
La serpiente enroscada en la cruz, que se erige fuera del santuario, es el símbolo de la serpiente de bronce que llevó a Moisés por el desierto y la cruz en la que Jesús fue crucificado. La iglesia conmemorativa de Moisés en el monte Nebo tiene una gran cantidad de increíbles mosaicos.
La visita se hace bastante rápido y había muy buenas vistas desde aquí, son espectaculares. Los mosaicos de la iglesia también están muy bien.
Y de nuevo rumbo a Madaba, donde reservamos en el mismo alojamiento que estuvimos la otra vez. Hemos llegado a las 16h y hemos aprovechado para hacer shopping, algunas compras de souvenirs: jabones, barro del mar Muerto, dátiles… No estábamos seguros si en Ammán habría de todo, así que preferimos comprar algunas cosas, por si acaso.
Y fuimos a cenar al Centro Comercial de Madaba, para cambiar un poco de los sabores tradicionales. Había un McDonald’s, que no habíamos visto ninguno en Jordania, y otros restaurantes de comida rápida. Nos pedimos un pollo frito y arroz frito.
Dejo la información sobre Dana, por si a alguien le es de utilidad.
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