Jordania e Israel: Introducción y preparativos

Introducción:

Este año también hemos decidido nuestro viaje en función de las restricciones covid. En muchos países pedían cuarentenas, PCRs, etc., así que nos decidimos por Jordania, que no pedía nada, sólo el certificado de autoresponsabilidad que se hace online.

Estando tan cerca de Israel pensamos que sería muy buena opción acercarnos a Jerusalén, que está a una hora en coche de Jordania, pero al comprar los vuelos pedían 24h de cuarentena + doble PCR. Lo que hicimos fue montar 2 viajes: uno con Israel y otro sin, con los hoteles cancelables. Así, en el último momento cancelaríamos los hoteles y la reserva de coche de alquiler que no necesitáramos. En junio levantaron todas las restricciones en Israel, así que finalmente pudimos hacer el viaje que queríamos.

Este año teníamos la segunda quincena de julio, y es el primer viaje que no coincidiremos con nuestra hija. Ella estará en Sudáfrica durante el mes de agosto.

Preparativos:

1. Itinerario:

Finalmente pudimos hacer la opción con Israel, que suponía 3 noches en Jerusalén. Si no hubiera podido ser, hubiéramos dado una noche más a Aqaba, y seguramente 2 más en Amán, para poder hacer los castillos del desierto, que también son considerados patrimonio de la Unesco.

El viaje empezaba y acababa en Amán. Cruzábamos la frontera terrestre entre Jordania e Israel desde Madaba por Allenby Bridge. Estaríamos 3 noches en Jerusalén y en bus íbamos hacia el sur hasta Eilat, donde cruzamos de nuevo la frontera para empezar el itinerario por Jordania de Sur a Norte y terminar en Amán. En Aqaba reservamos un coche de alquiler que devolveríamos en Amán.

En Israel nos quedó pendiente la fortaleza de Masada, cuya visita cancelamos en el último momento. En el día correspondiente daré la información de Masada, para los que puedan estar interesados en visitarlo, y por qué lo cancelamos.

También cancelamos sobre la marcha las caminatas en Dana y creo que fue muy acertado. No pasamos excesivo calor, como pensábamos, pero íbamos un poco quemados del sol y ya hicimos caminatas en el desierto y en Petra, así que creo que nos quedó el planing más desahogado y lo disfrutamos mejor.

2. Vuelos

Hay vuelos directos a Amán desde Barcelona, pero nos salían por unos 500€ en marzo, cuando reservamos. A Tel-Aviv eran mucho más baratos, pero como no sabíamos si iban a levantar las restricciones, no nos la quisimos jugar.

Así que reservamos vuelos con escala nocturna en Roma, pero que también nos permitía aprovechar más el tiempo, ya que salíamos el mismo día por la noche, después de trabajar, y llegábamos al mediodía, ya que otros no llegan hasta la noche.

Además, si coges vuelos de diferentes compañías, una escala demasiado corta puede ser arriesgada. Fuimos con Vueling y WizzAir y volvimos con Ryanair, ambos con escala en Roma, por 220€ pax.

3. Seguro de viajes

Cogimos un seguro de viajes de cancelación, como solemos hacer cuando reservamos con mucha anticipación, pero no lo hemos usado nunca. Y en cuanto al tema sanitario, tenemos nuestras tarjetas de la mutua de salud que nos cubren en todo el mundo. De momento no las hemos tenido que utilizar en ningún sitio.

4. Clima en verano

Antes de ir miramos el clima que hacía por la zona y si aquí estábamos a 35º, allí, en los mismos días, estaban a más de 40º, sobre todo en Aqaba. De todas formas, pasamos menos calor del que esperábamos.

En Jerusalén hacia las 19 h se gira viento e incluso íbamos con manga larga porque hacía fresco si nos sentábamos en una terraza, también por la mañana.

En el desierto dormimos tapados con la manta y la puerta y ventana cerrados, o sea que también fresco al atardecer. En Petra madrugamos mucho para hacer la visita porque todos nos decían que a mediodía ya no se podía respirar, y estuvimos de 6.30 a 17.30h sin problema.

En Aqaba es donde más calor hacía. La playa sur está vacía por el día y abarrotada al atardecer y por la noche. Allí hace más bochorno. Pero lo peor fue el Mar Muerto y el agua caliente, también la de las piscinas.

En Amán, en la sombra el sol es soportable, incluso en Jerash viendo las ruinas. Lo que nos saltamos fue Darna porque creo que hubiera sido exceso de sol para nuestra piel. En general, si estás en una sombra, el calor es soportable porque es seco.

La vuelta a Barcelona ha sido mucho más dura, a 28º ya a las 9 de la mañana.

5. SIM Telefónica

Compramos una SIM de Orange en Madaba por 10 JD. Me costó encontrar un sitio donde comprarla por el tema del idioma. No recuerdo cuantas gigas me incluía, pero más que suficiente y duraba 1 mes. Cuando pasamos a Israel no me funcionó. En el aeropuerto de Amán hay una tienda 24h.

Tampoco funcionaba en algunos lugares. Recibía muchos SMS para actualizar. Creo que podíamos haber prescindido de ella. O igual soy yo, que no me entero.

6. Moneda y targetas

En Jordania la moneda es el dinar jordano, cuyo código es JOD y se suele abreviar como JD. Aquí el cambio nos es desfavorable. Cuando fuimos 1 € valía 0,72 JOD aprox.

En Israel la moneda es el shequel israelí cuyo código es ILS. Aquí con 1 € teníamos 3,4 shequels. Yo dividía por 4 para saber los precios y redondeaba al alza. De todas formas, aunque salgamos ganando con el cambio, nos sigue saliendo todo carísimo.

En ambos países no se puede pagar con tarjeta en todas partes, aunque sí muchos sitios. Y en algunos cobran una comisión del 3%. En Jerusalén hay muchísimos cajeros. Casi en cada esquina tienes un ATM para sacar dinero. Nosotros lo usamos para tener shequels.

También aceptan euros en algunos sitios y en ambos países aceptan la moneda del país vecino.

En Jordania cambiamos a través de algún banco que tienen mejores cambios. Tenía mirado por internet Alawneh Exchange, que tiene oficina en Madaba y Aqaba.

7. Precios y aplicación Talabat (restaurantes)

La aplicación Talabat es una especie de Just Eat. Nos la recomendaron unas chicas que conocimos allí. Le puedes marcar tu ubicación y te salen los restaurantes y bares disponibles en la zona. Tienes las fotos, lo que ayuda a la hora de elegir comida.

A pesar de que no la usamos mucho porque nos quedaba poco viaje, pero nos fue bien para ver los precios de donde estábamos y las opciones que teníamos. A mí no me funcionó, no tengo muy claro por qué, igual tenía que poner el teléfono jordano, pero ellas la usaron en varias ocasiones. Así que igual soy yo que no tengo mucha práctica para estas cosas. En Petra fuimos a por unos gofres y frappelattes y nos sacaron la carta con los precios más caros, pero cuando les enseñé la app, me dijeron que vale. Así que supongo que esto de los precios debe ser lo habitual.

Nos ha sorprendido que ambos países son caros para nuestro estándar. Israel es carísimo. En los restaurantes que mirábamos los platos se iban hacia los 50 ILS con facilidad, lo que son unos 15€ y me refiero a restaurantes sencillos, sin ningún lujo. Es de agradecer que las visitas son casi todas gratuitas. Los precios en los supermercados son de escándalo, en comparación a los nuestros.

Y en Jordania, descubrimos que a los turistas nos cobran 4 veces más de lo que pagan ellos. Esto sumado a que en el cambio perdemos, pues hay que afinar para que no se disparen los gastos. Es difícil encontrar un supermercado o tienda con los productos marcados con el precio, con lo cual nosotros preguntábamos el precio, pero siempre es mucho más caro de lo que debería ser.

Encontramos una tienda cerca de Petra con un cartel de precio local, y ha sido lo único “barato” que hemos encontrado en todo el viaje. La botella de agua de 1,5l, que te bebes en nada, no baja de 1 JD en ningún sitio, cuando no son 2 JD. Y aquí creo que nos costó 0,5JD, o sea 0,7€ y además nos hizo descuento por llevarnos un paquete.

En Playa Sur en Aqaba, en el Bedouin Moon, de una noche al mediodía subieron el precio de las pizzas 2 JD. Pregunté y me dijo que sí, que habían subido precios, pues no nos quedamos. En el Darna nos costó una hamburguesa no tradicional, con su pan plano y la hamburguesa al lado, 7 JD. En la playa 2 JD. Hay que mirar un poco más de la cuenta….

En Aman hay que fijarse porque los restaurantes están en el primer piso. A veces ves sólo un pequeño espacio donde cocinan, pero hay unas escaleras que te llevan al piso de arriba, que es donde sirven. Así que hay que mirar porque puede pasar desapercibido.

Los entrantes como humus o ensaladas, suelen ser “baratos” en todas partes, entre 1 y 3 JD, aprox. Pero si ya pides pollo, pinchos, pescado… te puede subir de 8 a 13 JD tranquilamente, o sea de 11 a 18€, en lugares sencillos.

Nuestro guía en el desierto nos compró una lata de cola y le costó 0,25 JD. Si la hubiéramos comprado nosotros, nos hubiera costado 1 JD, según nos dijo.

Y tema aparte es la cerveza. Cuando la encuentras te sale por unos 5-6€. En Jordania fue difícil encontrarla. En algunos sitios tienen sin alcohol. Y hay las típicas licorerías donde sí la puedes encontrar.

8. Visado y Jordan Pass

Esta es la página web de la Jordan Pass, con los precios actualizados.

Puedes elegir con acceso a Petra por 1 o hasta 3 días. Nosotros elegimos la opción de 2 días.

El visado de 1 entrada vale 40 JOD, así que solo con el visado más la entrada a Petra, ya compensa comprar la Jordan Pass.

Una vez hayas comprado la Jordan Pass, llega por correo electrónico una versión en pdf y otra en formato imagen, que deberás imprimir y mostrar al personal de aduanas con la parte impresa hacia fuera, ya que a veces el código QR no puede leerse desde el teléfono.

En las atracciones turísticas simplemente hay que enseñar el ticket a la entrada de cada atracción incluida en el pase para ser escaneada. En algunos sitios sólo la miran. Es válido durante 12 meses desde la fecha de compra, pero expira automáticamente después de 2 semanas desde la primera vez que se escanea en la primera atracción turística.

Si tienes pensado visitar el sitio del Bautismo en Betania, vale 12 JODs, pero al comprar la entrada junto con la Jordan Pass costará 8 JOD.

Además, cuando la compras también tienes la opción de elegir gratis el viaje en el tren de 1916. Este viaje es para los jueves, y coincidió que nosotros estábamos un jueves en el desierto de Wadi Rum, así que lo reservamos y nos gustó mucho. Lo explico en la entrada del desierto.

Ruta por Jordania e Israel y conclusiones