Túneles Cu Chi (día 18, domingo, 22 de julio de 2018)

Hoy dedicaré el día a visitar los famosos Túneles de Cu Chi. También tenía por hacer la excursión al Delta del Mekong, pero como ayer llovía tenía que elegir una, así que sin duda me quedo con la de los túneles.

En estos túneles conoceremos las vivencias y la historia de la famosa guerrilla del Vietcong que luchó contra las tropas norteamericanas en la Guerra de Vietnam. En los túneles podremos conocer como era el modo de vida y sus técnicas militares.

Están en la parte noroeste de la Ciudad de Ho Chi Minh, a 40 minutos del centro de la ciudad, a unos 27km. Esta es una visita turística interesante para conocer de primera mano la historia reciente de Vietnam, las guerras de Vietnam e Indochina y, sobre todo, el ingenio vietnamita.

Esta excursión te la ofrecen todas las agencias. Hay el turno de mañana y el de tarde. En el de mañana hay más gente, así que resérvalo un par de días antes. También dura más rato porque por la noche, cuando se acaban las horas de luz, ya te tienes que ir. Por la tarde suele ser también más barato, hay menos gente y con reservarlo el día antes es suficiente. El el precio de la excursión te entra el bus y el guía, pero no el túnel.

Tengo la excursión de los túneles a las 13h. porque el grupo de mañanas, al ser domingo, estaba llenísimo. Al principio no me hizo mucha gracia, pero ayer estuvo lloviendo y no lo pude hacer, así que no tenía más alternativa. Pero al final estuvo de coña porque por la tarde estábamos sólo 3 grupos, y no había nadie más.

Y mira que cuando llegamos nos acojonamos porque había un montón de autobuses, pero estos eran los grupos que ya salían porque ya habían acabado.

Nosotros llegamos como a las 14.30h, que es más o menos a la hora que acaban los de la mañana. Por eso nos juntamos mucha gente a la entrada, pero luego estuvimos casi solos. Esta visita ha sido de lo mejorcito. La guinda para acabar mi ruta por Vietnam.

Hay una zona de maquetas, donde podemos ver cómo era la vida en los túneles: escuelas, comedores, dormitorios, trincheras, hospitales, talleres, salas de mando, mapas, etc. También hay los uniformes con que iban vestidos…

El guía que teníamos había sido soldado en la guerra de Vietnam y claro, nos iba explicando anécdotas y un montón de detalles. Le tocó luchar en el bando de los americanos. Ya sabemos que Vietnam del sur luchó con los americanos contra Vietnam del norte, que eran los comunistas. Nos dijo que le tocó luchar con los americanos porque estaba en Ho Chi Min y por zona fue lo que le tocó. Nos explicó un montón de batallitas, muy divertido, se lo curró un montón. Nos cantó, nos explicó como funcionaban las armas y las trampas.

El recinto es impresionante. Al final, lo de los túneles que más me apetecía hacer, acabó siendo lo de menos. Tras las maquetas nos adentramos en la Jungla de Cu Chi. Aquí vas caminando por la jungla vietnamita, donde puedes ver los cráteres formados por los impactos de las bombas. Te hacen descubrir la puerta de entrada a los túneles. La pequeña trampilla de acceso, perfectamente camuflada entre la maleza, hojas y tierra, es prácticamente indetectable. Las escotillas de acceso se hicieron de forma que permitieran el paso a los vietnamitas (bajitos y menos corpulentos) pero no a los invasores.

Llegas allí y tienes un montón de agujeros donde se escondían para disparar, trampillas, trampas… Aquí veremos una muestra de las distintas clases de trampas utilizadas por el Viet Cong para herir o matar al enemigo. Dato curioso e ironías de guerra, los restos de las bombas americanas eran fundidas para reutilizar el metal y poder construir las trampas. Tu pasas por allí y no ves la trampa y de golpe el guía le da con el palo y flipas. Obviamente todo está acordonado para que nadie se haga daño.

Estas trampas abarcan desde un agujero en la selva que en su interior está repleto de estacas de bambú afiladas, como pequeñas trampas diseñadas para herir las piernas de los enemigos. Todas tienen en común que utilizan el peso del enemigo para auto-impalarse.

Nos estuvo explicando cómo funcionaban los túneles, que había tres niveles, que aquí solo queda un trozo pero que había más de 250 km… Y que el nivel inferior sólo era para emergencias. Cuando él luchaba con los americanos y a veces hacían fuego en los túneles para que el humo les hiciera salir y pasaban 15’, 30’, 1 hora y allí no salía nadie era porque habían pasado a los niveles inferiores. Lo mismo hacían con el agua, que intentaban inundar los túneles desbordando el agua del río, pero se les acababa el agua del río y seguían sin salir por lo mismo, porque habían pasado al nivel inferior. Nos explicó muchas batallitas, de sus amigos en la guerra, anécdotas y todo muy interesante.

Hay 3 túneles en Cu Chí en los que podemos adentrarnos y cada uno de ellos se hace más largo y más estrecho. Nosotros pudimos hacer el corto y el largo, supongo que al ser por la tarde no daría tiempo a hacerlos todos. Mejor empezar por el primero porque es fácil que en el último no se quepa. En cualquier caso, hay salidas desde cualquiera de ellos.

La visita por Cuchi concluye en unas trincheras donde podemos ver restos del armamento utilizado en la guerra de Vietnam: bombas de racimo, lanzacohetes, lanzamisiles que montaban los helicópteros americanos, una colección de armas de corto alcance y ametralladoras (el célebre subfusil AK-47, arma por excelencia del Viet Cong forma parte de la muestra).

Aquí nos darán la oportunidad de disparar munición real usando un AK-47, o una ametralladora M-16, el arma americana. Las armas están configuradas en modo manual, es decir, se disparan las balas de una en una (para evitar una ráfaga automática y quedarnos sin munición con tan solo apretar el gatillo). Además, se han puesto topes de cuero en el enganche del cargador para que las balas salgan más despacio, teniendo así menos retroceso el arma.

Que nadie se decepcione al leer esto porque el ruido que hacen las armas al disparar la munición real es ensordecedor y el retroceso de la ametralladora es brutal. Antes de dejarnos siquiera tocar el arma, el guía turístico se asegurara de que cogemos el arma de manera correcta y que la apoyamos contra nuestro hombro para minimizar el retroceso. Impacta, impacta mucho y eso que las armas están un poco trucadas. Sólo un poco porque claro, si quieres disparar y le quitas el ruido y el retroceso, pues no tienen ninguna gracia. Pero aún así impacta mucho disparar. Yo elegí la mítica Kalashnikov AK47.

Allí conocí una parejita de españoles que acababan de empezar el viaje y estuvimos de charla, comentando el viaje. Él sí quería disparar pero ella no, así que me partí el cargador de 10 balas con él y disparamos la mitad cada uno, suficiente para probar la experiencia. El precio del cargador era 600.000 por 10 balas.

Luego fuimos a la zona de los túneles, que acojonan bastante. Había algunos ingleses que estaban cachas y no cabían, y eso que los han ensanchado para los turistas. De la pareja que conocí, el chico se tuvo que salir a la mitad porque tampoco cabía. Cada vez se va estrechando más y hay trozos que tienes que ir agachado, incluso a gatas o en cuclillas. También es probable que toques con los hombros en las paredes. Da un poco de claustrofobia, está bastante oscuro y hay sólo alguna lamparita y mucha humedad. A mi me gustó mucho y como hago tan poco bulto no tuve problemas para pasar… De todas formas, durante el túnel hay diversas salidas para que, quien se agobie o no quepa, pueda salir. Estuvimos un buen rato a gatas y hay que decir que impresiona bastante.

Trampa en los túneles Cu Chi de Ho Chi Minh, Vietnam.

Un poco de historia de los túneles…

La Ciudad de Ho Chi Minh (anteriomente llamada Saigón) fue duramente castigada durante la ocupación francesa y durante la guerra de Vietnam. Los americanos bombardearon la zona de manera incesante, haciendo de Saigón un lugar tan inhóspito que la única alternativa era vivir bajo tierra. Mucha gente cree que estos túneles se construyeron durante la Guerra de Vietnam contra los americanos, sin embargo, son anteriores, se construyeron durante la ocupación francesa y fueron ampliados durante la guerra de Vietnam.

Los campesinos por el día labraban los campos de arroz y al caer el sol, excavaban los túneles. Un total de 220 kilómetros de túneles divididos en 3 niveles a 6 metros, 8 metros y 10 metros de profundidad bajo tierra, donde llegaron a vivir más de 10.000 personas.

El diseño de los túneles es en zig-zag y sirvieron de enlace entre distintas aldeas (algunos túneles pasan por debajo de los ríos) y jugaron un papel definitivo para el desenlace y victoria vietnamita en la Guerra. Sin ir más lejos, el líder Viet Cong Ho Chi Minh planeó la ofensiva Tet en el interior de los túneles de Cu Chi. Los túneles estaban tan bien camuflados que incluso los americanos montaron un campamento encima de los túneles sin ni siquiera darse cuenta.

Los vietnamitas utilizaban los túneles para moverse de un lugar a otro de la selva, atacar al enemigo y desaparecer sin dejar rastro. Los vietnamitas robaban las provisiones a los americanos primero por cuestiones logísticas y segundo, para motivar al Viet Cong, cada saco de arroz y provisiones robadas a los americanos moralizaba aún más si cabe al pueblo vietnamita, cuyo lema era lucharemos mil años más. El ejército del Viet Cong utiliza los túneles de Cu Chi para aparecer de la nada, emboscar al enemigo y desaparecer sin dejar rastro.

Los túneles fueron descubiertos por casualidad por un sargento americano, que creyó haber sido picado por un escorpión cuando en realidad se había sentado sobre una de las trampas colocadas a la entrada de una trampilla de acceso a un túnel. En un principio se subestimó la longitud de los túneles, ya que era muy peligroso mandar a soldados al interior de ellos, plagados de trampas y muy estrechos.

Al principio se utilizó agua, gases tóxicos y explosivos para neutralizar los túneles, pero no tuvieron efectividad más allá de los primeros cientos de metros, debido a los sistemas de defensa con los que contaban. El ejército americano utilizó perros para buscar los accesos a los túneles, pero eran fácilmente despistados utilizando uniformes de soldados americanos abatidos o simplemente, con pastillas de jabón robadas a los americanos.

Tras el fracaso, los americanos declararon Cu Chi como zona de Guerra Abierta, teniendo los soldados libertad absoluta para abrir fuego a discreción y también se decidió bombardear la zona. La zona de Cu Chi conocida como Tierra de Fuego fue bombardeada sin cesar y el Viet Cong tenía que permanecer durante días en los túneles sin poder salir. Una vez asumido el fracaso por parte de los americanos, se creó una unidad especial llamada ratas de túnel, cuya finalidad era adentrarse en los túneles y acabar con cualquier soldado vietnamita.

Hay que decir que tuvimos muchísima suerte porque en el trayecto en bus hacia las cuevas nos llovió un poco, pero eso hizo que refrescara así que nos fue de fábula. Cuando llegamos paró y pudimos hacer la excursión sin problemas. Y cuando acabamos de vuelta pillamos un poco de caravana, pero todo bien.

Ducha, preparar la maleta porque mañana cojo vuelo y salida a cenar. Perfecto día.

Otros precios del día:

Excursión túneles: 115.000 dongs

Día 19: Vuelo a Phuket (Tailandia) y llegada a Krabi (AO NANG, KRABI, TAILANDIA)