Puerto Maldonado (día 16: 15-8-2023, martes)

En la zona más al sur de la Amazonía peruana, y cerca del departamento de Cuzco, está Puerto Maldonado, una pequeña ciudad donde puedes pasar unas vacaciones en completa conexión con la naturaleza. En Tambopata hay hospedajes turísticos ‘eco lodges’, en plena selva.  

Puerto Maldonado es el punto de partida hacia diversas excursiones a la selva sur de la Amazonía peruana. Por eso, lo primero que hay que hacer es llegar a esta ciudad. Se puede llegar en avión, a 90’ desde Lima y a 60’ desde Cuzco. Pero desde Cuzco también se puede llegar en bus, en un trayecto nocturno de 10 horas aprox, a través de la carretera interoceánica que conecta Perú y Brasil.

Las agencias ofrecen programas de 1, 2, 3 y 4 días, realizando caminatas diurnas y nocturnas, paseos en bote, canopy y zipline; todo entremedio de la intensa vegetación y los sonidos de animales a tu alrededor y a unos precios elevados, para el estandard de Perú.

Normalmente los alojamientos se ubican a la orilla de alguno de los dos ríos principales de la Reserva: el río Tambopata, que es el pequeño, y el río Madre de Dios, el grande. Para llegar a ellos desde Puerto Maldonado en ocasiones necesitarás tomar una lancha.

Nosotros acabamos nuestro viaje a Perú aquí y volvíamos a casa directamente desde el aeropuerto de Puerto Maldonado. Así que elegimos nuestro alojamiento cerca del río Tambopata porque podíamos ir por carretera, no era necesario coger ninguna lancha.

Nuestra llegada a Puerto Maldonado

Tras un plácido viaje en bus, llegamos puntualmente a Puerto Maldonado a las 7 de la mañana. Así como el SuperCiva no me gustó nada, el ExcluCiva fue fantástico. Yo vine durmiendo todo el camino. También tiene USB y asiento muy cómodo y eso que vinimos en el semi cama. Eso sí, se notaba zona de muchas curvas y baches ya hacia el final del trayecto.

Decían que el contraste de temperaturas a la llegada a Puerto Maldonado era importante, puesto que venimos de alturas de 3000 metros y llegamos a la selva, donde hará muchísima humedad. Pero nosotros no notamos tanto calor. De hecho, parece que tuvimos suerte porque se habían suavizado las temperaturas en estos días.

A la salida de la terminal de autobuses cogimos un tuc tuc para que nos llevara a la Plaza de Armas, donde están las agencias de viajes. Nos dijo que 10 soles… y cuando llegamos allí nos pidió 10 por persona. La primera en la frente!! Evidentemente, no era así, nos lo confirmaron luego en el alojamiento, pero en fin…

Ayer mismo cambiamos nuestro alojamiento, porque el que tenía reservado no se avino a igualarme el precio de la excursión y me estuvo remoloneando en contestar, etc. y como lo cogí cancelable hasta el último día, al final decidimos cambiarlo y cogimos otro que nos ofreció una excursión que nos encajaba más con lo que queríamos.

De todas formas, como siempre se dice que en destino puedes encontrar mejores precios y había quien lo negoció aquí en Puerto Maldonado, fui con la idea de informarme directamente y empezamos a preguntar en las diferentes agencias.

Hay un montón de excursiones que puedes elegir. Nosotros ya veníamos con la idea de hacer la del Lago Sandoval + caimaneo y quizás mañana, la de la Collpa de Loros. Así que preguntamos por las dos. Pero ahora mismo creo que no es buena idea hacerlo así porque ha bajado el turismo y ellos han subido precios y los mantienen bastante inamovibles. Así que una vez aquí, pues si quieres hacer la excursión, tienes que pagar lo que te pidan, por lo que mejor asegurarte antes que lo que te piden, te encaja.

Había leído que en el Lago Sandoval hace mucho bochorno, que estás con la camiseta empapada, y que la excursión de todo el día hay a quien se le hace pesada, así que fui preguntando, porque antes la hacían de medio día y así luego podríamos añadir el caimaneo. Pero todos hacen la excursión de día entero, eso es de las 9 a las 17h. Así que el caimaneo, que se hace al atardecer, si no lo contratas con la misma agencia, no te da tiempo a hacerlo. Ellos invierten lo mismo si el tour es de medio día que de día entero, pero claro, el precio para ti no es el mismo, así que les interesa alargar la excursión para subir el precio.

Lo que nos ofrecieron en la Plaza de Armas no nos gustó, así que decidimos contratarla con el nuevo alojamiento, que nos ofreció la excursión al Sandoval de mediodía junto con el caimaneo, a un precio que nos encajaba, pues era justo lo que queríamos. Mientras preguntábamos nos encontramos con una pareja con quien habíamos coincidido en el bus, que venían con todo contratado y que se quedaron esperando que les vinieran a recoger… pero que, como no vino nadie, tuvieron que coger un tuc tuc y ahora estaban en la agencia, para empezar las excursiones.

Parece que en Puerto Maldonado tienen su propio estilo…

Cogimos un taxi hasta el alojamiento, que estaba en una carretera sin asfaltar, camino del río Tambopata y nos costó 30 soles. En el alojamiento nos dijeron que el precio tenían que haber sido 15 soles, así que ya llevamos 2 de 2!!

El alojamiento no lo voy a recomendar porque no cumple con los mínimos ni de limpieza, ni de seguridad, ni de nada. Parece que es una Reserva Natural Privada, que en su día tendría su público, pero que ahora sólo tienen unas 3 o 4 cabañas, los caminos no han sido mantenidos así que están llenos de vegetación, el baño común no voy a dar detalles de cómo estaba, lo mismo que la sala común, en medio de la selva, al lado de una carretera polvorienta y que lo llevan entre 2 personas. Una pena porque el mobiliario de madera era precioso, pero estaba todo tan polvoriento que no lucía nada.

Nuestra cabaña estaba correcta, con mosquitera, pero a algunas horas tuvimos hormigas y una rana. No pudimos estar más salvajemente ubicados, a unos pocos metros del río Tambopata… lo veíamos desde nuestra habitación. Nosotros somos un poco alternativos, así que nos pareció bien, pero no es un lugar recomendable para todo tipo de público.

A nuestra llegada nos dimos una ducha con agua fría, ya contaba con que no habría agua caliente, y no hacía tanto calor… Tras un rato de relax, nos pidieron un taxi que costó 15 soles hasta la Plaza de Armas. Había que pagar la excursión que fueron 175 soles por persona, y que incluía la entrada a la Reserva que no recuerdo si eran 15 o 25$. La agencia era Amazon Paradise.

Tour al Lago Sandoval

Esta es probablemente la excursión más popular de Puerto Maldonado, pues en este lago se concentran muchos de los animales que verás durante tu aventura por la Selva Amazónica. Puede ser excursión de medio día o día entero, aunque la de medio día, que es la que nosotros queríamos, nos costó encontrarla.

Tras pagar en la agencia, salíamos en un grupo de 9 personas a coger la lancha en el Río Madre de Dios.

Desde los alojamientos se tarda en llegar unos 30-45’ en la lancha, por el río Madre de Dios. La excursión empezaba como a las 13.30h. Fuimos andando ya que está a unos 5′ y en la barca y ya tenían preparadas unas bandejas con la comida. A mi me tocó pescado, me preguntaron si me iba bien, y estuvo de fábula. La otra opción es la comida típica de aquí de pollo con arroz envuelto en una hoja. También nos dieron una botella de agua, con la que tuvimos más que suficiente para la excursión. Al comer durante el trayecto de la lancha rápida por el río Madre de Dios, estuvo genial porque aprovechamos el tiempo.

Al ir en grupo, algunos tenían todo el pack de excursiones contratados e íbamos a parar un momento en su alojamiento para que dejaran el equipaje. Está claro que este alojamiento no tenía nada que ver con el nuestro, pero el precio tampoco…

De nuevo a la barca hasta el acceso al Lago Sandoval, al otro lado del río, que ya estaba muy cerca. Brutal cuando bajamos de la barca la concentración de mariposas que había. Las habíamos visto volar durante todo el camino en barca, pero nunca había visto algo igual.

Luego hay que recorrer un sendero de 3 km que discurre enteramente sobre unas pasarelas de madera, donde el guía aprovecha para contarte más sobre este ecosistema tan rico. Desde árboles centenarios y gigantes, a monos, tarántulas y pájaros. Pudimos ver un grupo de monos en lo más alto de los árboles, apenas alcanzaba la vista.

Un poco más adelante, al final del camino, nos cruzamos con la pareja del autobús, que iba con su grupo ya acabando la excursión, y no les había entusiasmado. No habían visto monos, sólo algunas aves y ya estaban muy cansados, tras el viaje en bus y llevaban todo el día aquí… Lo que me confirma que no podíamos haber elegido mejor opción, porque nuestra excursión no había hecho más que empezar y estábamos super satisfechos.

Al final del camino te montas en una canoa de madera a remo (no se permiten los motores) y atraviesas un canal que bien parece el escenario de cualquier documental de National Geographic, hasta llegar al lago. Es como un túnel por entre la vegetación donde vas viendo aves, también algún caimán. Todo en silencio, escuchando el silencio o el sonido de la selva. Fue muy chulo… y cuando llegas al final, se abre el horizonte y vas a parar al lago.

Seguimos adentrándonos en el lago, acercándonos a las orillas cuando algo se movía, y sorteando las raíces que se adentran en el agua. Allí se pueden ver caimanes, tortugas adornadas con mariposas sobre sus cabezas, monos y montones de aves diferentes.

Los que tienen la excursión de todo el día, pasan el resto del día navegando por el lago. A mitad del lago hacen una parada para comer y descansar un rato (en una zona con bancos, hamacas y una cabaña-restaurante donde se pueden comprar bebidas), y a continuación hay otra parada para subir a una torre mirador para ver el lago y la selva.

Nosotros estuvimos disfrutando mucho de todo… y el día se iba oscureciendo y allí estuvimos volteando el lago hasta el atardecer. Precioso!!

Cuando salimos del lago, sólo quedaba otra barca detrás nuestro. Eran como las 18h cuando dejamos la canoa, que allí ya era de noche y deshicimos lo andando por el camino de madera. En la ruta de salida, hicimos lo que sería la caminata nocturna: vimos tarántulas, una culebra, hormigas enooormes, sapos. Por el camino nos fueron explicando la vida nocturna en la selva. Había que acompañarse de la linterna pues ya no se veía nada, y menos en plena selva.

Cuando llegamos a la lancha motora, entonces íbamos a hacer el caimaneo. Para ello había que apagar todas las luces, también los teléfonos. El cielo fue impresionante. Nunca había visto tantas estrellas. No las recordaba ni de cuando era niña, ni cuando hemos estado en el desierto o en zonas poco pobladas. Fue brutal.

Y ellos llevan un foco en la barca con el que apuntan a la orilla donde creen que puede haber caimanes o capibaras, que es la otra especie que tienen por allí. A aquellas horas se veían muuuchos barcos con focos todos haciendo el caimaneo.

Vimos varios caimanes y una pareja de capibaras. Nos dijo que tuvimos muchas suerte por ver los capibaras juntos, que últimamente no se dejaban ver.

Y con esto acabamos la excursión. Nos dejaron en Puerto Maldonado, y fuimos andando a la Plaza de Armas, muy cerca. Curiosamente hacía fresquito. Nos habíamos puesto repelente, insistían mucho en ello, y no nos picaron, y tampoco pasamos calor. Hemos tenido muy buen día.

Cenamos en una pizzeria… muy normal. Lo que queríamos no tenían… al final pedimos alitas, que acabó siendo una alita gigante y un muslo. La pizza no era casera, como se veía en las fotos. En fin… seguimos igual. La verdad es que ha sido la peor comida de todo el viaje.

Cogimos un taxi hasta el alojamiento y llegamos casi a las 21h. Estábamos muertos pero veníamos muy contentos de cómo había salido la excursión, a pesar de los percances varios de todo el día.

De noche, no encontrábamos nuestra cabaña, con la linterna… Le dimos 3 vueltas a la zona hasta que acabamos en la cabaña de los dueños, que nos acompañaron a la nuestra.

Cuando nos acostamos, se oían mucho ruidos, incluso pasos. Yo me tapé hasta el cuello y me levanté completamente empapada de sudor. Pero aún así dormí bien… ha sido una sensación rara y emocionante.

Día 16: Selva Peruana y vuelta a casa