Rusia: introducción y preparativos.

 

Introducción:

Rusia

Iglesia de San Basilio en Moscú, Rusia.

Este año el destino lo íbamos a decidir en función del presupuesto, que iba a ser un condicionante importante. Los vuelos intercontinentales encarecen mucho el presupuesto del viaje puesto que el precio, en el mejor de los casos, no baja de los 500-600€ por persona, si no mucho más. Así que buscamos el lugar más lejos al que pudiéramos ir sin gastarnos este pastizal en vuelos. Mapa en mano, la opción era Rusia, que a mí me sabía a poco para unas vacaciones de verano, pero que tenía posibilidades añadiendo Estonia, que no conocíamos y, de rebote, un día en Helsinki y otro de regalo en Riga.

Decidimos hacer una semana larga en Rusia y menos días en Estonia. Estuve mirando Finlandia, pero es extremadamente caro, así que nos contentamos con un día en la capital y el deseo de volver más adelante, en época de auroras boreales.

Por lo tanto, el viaje quedaba perfectamente delimitado y nos satisfacía plenamente a los tres. Las fechas son del 14 al 31 de agosto de 2018.

Preparativos:

1. Itinerario:

Dicen que en Rusia en verano hay mucha gente, así que queríamos ir la segunda de julio, para ver si así encontrábamos menos. Craso error porque no contábamos con el mundial de fútbol que se celebraba este año en Rusia y que acababa el 15 de julio, justo cuando nosotros llegábamos. Suerte que buscando información por internet nos dimos cuenta porque había paquetes de varias semanas que organizaban desde la otra punta del mundo para hacer turismo aprovechando el mundial.

Así que cambio de planes y elegimos fechas lo más lejos del mundial que pudiéramos. Eso nos llevó a la segunda de agosto. Los paquetes básicos suelen hacer 4 días en una capital y 3 en la otra, así que nosotros dimos un día más en cada una, y decidimos dar uno más a Moscú porque pensamos que nos gustaría más. Nos quedaban unos 5-6 días para Estonia y día y medio para Helsinki. A grosso modo ya lo teníamos, luego ya afinaríamos con la ruta.

2. Vuelos:

Lo normal para visitar Moscú y San Petersburgo es entrar por una ciudad y volver por la otra, para optimizar tiempo y tampoco implica diferencia de precios en cuanto a vuelos. Como notros seguiríamos de Rusia hacia Estonia, o sea, nos movíamos de Este a Oeste, pues el itinerario lógico era entrar por Moscú y salir por San Petersburgo que está bastante cerca de Tallin, nuestro siguiente destino. Luego entre una y la otra puedes ir en tren o en avión, a gusto del consumidor.

Los horarios de los vuelos a Moscú no nos gustaban mucho: tienes opción de llegar hacia las 00 de la noche o la 1 de la madrugada, lo cual no nos gustaba nada, o llegar a las 5 de la mañana, que tampoco nos apetecía puesto que el vuelo no es muy largo así que casi llegas sin dormir en toda la noche. Teniendo en cuenta la dificultad con el idioma, que tampoco dispondremos de teléfono para poder llamar si no encontramos el apartamento o al dueño, y que no deja de ser Rusia, pues queríamos llegar a una hora que fuera de día.

Así que pasamos de vuelos directos y nos decantamos por uno con escala. Y oh maravillas!! Había un vuelo con el que podíamos salir la tarde antes, y que no nos distorsionaba nada con el trabajo, dormir en Riga, que tiene el aeropuerto cerca y cuyo alojamiento es barato y aprovechar que no todos habíamos estado en Letonia, así que daríamos una vuelta rápida por el casco antiguo, ya que el año pasado habíamos estado y lo teníamos reciente. El ambiente nocturno de Riga también era apetecible en primavera, así que supongo que en verano más. Al otro día el vuelo salía a mediodía, por lo que tampoco habría que madrugar y llegábamos antes de las 15h a Moscú. Además, hacer este vuelo era baratísimo!!! Costó 96€ por persona. Y encima habíamos ganado una tarde y una visita a Riga.

Para la vuelta, miramos si volver desde Tallin o desde Helsinki, que las separan 2 horas y media en ferry y donde habíamos decidido pasar un día. Como de Tallin a Barcelona no hay vuelos directos todos los días, por fecha y precio nos encajaba mejor volver desde Helsinki. Así que la vuelta con Vueling hacia mediodía nos costó 71€. El total de vuelos de 3 personas ha costado 500€, y eso que había presupuestado 900!!

Hemos comprado los vuelos a finales de febrero. Empezamos el viaje fantásticamente bien!!

Como siempre hago, me gusta ver la evolución de precios los meses siguientes a la compre de nuestro billete, y este es el resultado:

  • Pasado un mes de la compra (22-3). Nuestro vuelo de ida ha desaparecido. La alternativa es una opción directa de Aeroflot que llega a las 17.40 h y que vale 180€. Nosotros pagamos 96. En cuanto a la vuelta desde Helsinki, sigue estando, pero a 80€. Nosotros pagamos 71 à Nos hemos ahorrado 280€
  • Pasado dos, tres o cuatro meses de la compra (22-4): El vuelo de Aeroflot ya remonta los 200€ así que de comprar ahora nos hubiéramos tenido que conformar con una opción a vuelo intempestivo, por 150€. El de vuelta sigue estando a 80€. A partir de los dos meses, se mantuvieron más o menos estables.

Conclusión: Como el precio no es el de un vuelo intercontinental, sino que es mucho más económico, está claro que el ahorro por anticipar no es tanto. En cualquier caso, comprar con una anticipación de entre 3-5 meses, te permite elegir los horarios que te interesan y tener un ahorro por persona de unos 100€.

3. Seguro de viajes:

Cuando hacemos grandes desembolsos en vuelos, siempre contratamos un seguro de cancelación, por si a alguien le pasa algo. Pero este año hemos viajado sin red de seguridad. Yendo tan cerca, me voy con muletas si hace falta… Cruzaremos los dedos.

Seguro médico: Como siempre, lo tenemos cubierto con nuestra mutua médica privada, que tiene asistencia médica en todo el mundo. Tenemos un número de teléfono donde tenemos que llamar si nos pasa algo y allí nos indicarán a dónde ir y qué hacer. No lo hemos usado nunca, así que no sabemos qué fiabilidad tiene. Además, en Rusia es obligatorio tener este seguro. Es uno de los documentos que tienes que aportar para tramitar el visado. Así que es IMPRESCINDIBLE.

4. Traslado entre Moscú/San Petersburgo:

  • Avión: el trayecto tarda entre 1 h 15’ y 1h 25’, depende de la compañía aérea. Y el precio está entre los 40-50€.
  • Tren: es la opción que nosotros utilizamos. Aquí puedes elegir entre un tren rápido o un nocturno. Nosotros nos dimos el gustazo de viajar en el tradicional Flecha Roja, cuyo trayecto se hace de noche. Se puede comprar con 90 días de anticipación y está claro que en agosto es el precio más caro que puedes pagar. Los precios varían bastante en función de la época del año.
    Si eliges el camarote en 2ª clase, estos son para 4 pax, te saldrá más barato que ir en avión, teniendo en cuenta que te ahorras una noche de hotel. Cuando nosotros reservamos salía por 45€.
    Si coges el de 1ª clase, estos son para 2 pax., te saldrá un poco más que ir en avión, pero para nosotros valía la pena probar la experiencia. A nosotros nos costó 80€ pax. Una cosa curiosa que descubrimos es que viajar en viernes sale unos 20€ más caro, elijas la tarifa que elijas, así que afina el calendario. Teniendo en cuenta que te ahorras la noche de hotel, los taxis al aeropuerto, y además tienes un desayuno incluido, no es tanta la diferencia.

5. Visado:

Lo tienes todo muy bien explicado en Rusalia aquí.

Resumiendo, los documentos que necesitas para tramitarlo son:

  • seguro médico: nos salió gratis puesto que ya tenemos la mutua que da cobertura mundial. Sólo te tienen que hacer el certificado que lo acredite. Suele costar unos 12-15€ pax.
  • carta de invitación o Visa Support: en uno de los apartamentos me la ofrecieron por 1300 rupias pax. En el otro ni me contestaron. La web donde lo puedes conseguir más barato que encontré es de hoteles y no hace falta que reserves con ellos. A mí me costó 500 rupias pax. Pero depende de donde obtengas el link con la misma web te puede costar hasta 1500 pax, así que busca… Este es el enlace que yo utilicé.
  • Formulario de solicitud de visado online: este es el link oficial.  Este paso no se puede hacer hasta que se tengan los dos documentos anteriores, puesto que pide datos que vienen en ambos documentos. También es importante saber ya cuando se entra y cuando se sale del país y las ciudades que se visitarán, puesto que también habrá que indicarlo.
  • 1 foto tipo carnet que habrá que pegar en el formulario de solicitud
  • Ir a solicitar el visado. En Barcelona el lugar para conseguirlo es la Central de Visados, que parece ser que es el único lugar autorizado para tramitar el visado turístico. Buscando información vi que trabajo muy cerca del consulado ruso, así que pedí cita y me la jugué, antes de tenerme que desplazar al centro de Barcelona expresamente. De hecho, en su web “recomiendan” tramitarlo en Central de Visados, pero no dicen que sea obligatorio. Además, el precio en el consulado son 35 € y en Central de Visados son 58€ pax.

Pues funcionó. Imprescindible pedir cita por internet. El único problema que tuve, es que no me dejaron tramitar el de mi familia. Según me dijo tiene que venir cada persona… Como mi hija se iba en julio a Vietnam y necesitaba el pasaporte, ella lo tuvo que tramitar en Central de Visados porque no había margen entre la nueva cita y la posible fecha de entrega. Pero Francisco se acercó a Barcelona y también lo tramitamos sin problema. Igual tardan un mes en darte la cita, al menos en verano. Luego necesitaras otros 10 días para que te lo preparen e irlo a recoger. Aquí sí que ya no es necesaria la cita. Con el justificante de pago que te dan, el personal de seguridad de la puerta te deja pasar.

El precio por persona del visado puede ir desde los 35€ del consulado, hasta más de 120€ depende dónde te lo tramiten, además de lo que pagues por cada uno de los documentos obligatorios que tienes que conseguir.  Nosotros íbamos en agosto y mi cita en el consulado fue a mitad de mayo. Nos costó tramitarlos 3 visados 148€, y eso que uno lo pagamos caro…

6. Aprender a leer cirílico

Creo que merece la pena el esfuerzo. Os puedo decir que en un rato aprendí la mayoría de las letras, y eso que mi memoria ya no es lo que era. Algunas son iguales, otras son conocidas pero tienen otra lectura en el cirílico y algunas son raritas para nosotros.

Esto para lo único que te servirá es para poder leer, nada de hablar, los carteles por ti mismo y saber si es un cartel u otro el que se corresponde con lo que tú buscas. Tren, metro, tiendas, lugares turísticos, carteles turísticos… Con esto te puedes valer por ti mismo y ganas tiempo teniendo en cuenta que dicen que casi nadie te va a entender si hablas inglés, con lo que otros idiomas ya los descarto.

Además de que mola leer un poco un idioma tan diferente al nuestro…

Tengo que decir que leer cirílico me ayudó a descifrar direcciones con más facilidad. Lo de que nadie habla inglés… pues nosotros encontramos mucha gente que sí hablaba: restaurantes, taquillas, por la calle… Y además la mayoría del metro también está rotulado en inglés. Pero poder leer cirílico te ayuda a leer siempre y acabas entendiendo palabras que a primera vista no entendías. Esta es la web que yo utilicé.

7. Moneda rusa: efectivo o tarjeta

Había leído que no había muchas casas de cambio en Rusia y que en los bancos cobraban comisión y que mucha gente pagaba todo con tarjeta de crédito/débito. Pero la mayoría de nuestras tarjetas cobran una buena comisión por utilizarlas con divisa diferente. Así que investigando descubrí la tarjeta Bnext, que es una tarjeta monedero con la que puedes pagar hasta 2000 € y sacar de cajeros hasta 500€ al mes, totalmente gratuita. Así que me la saqué y fue todo un acierto. El importe al cambio que marcaba XE era el que se me descontaba de la tarjeta, casi al céntimo. Hay otras tarjetas similares, así que supongo que cualquiera sirve, pero a mi esta me ha ido muy bien.

En Rusia se paga absolutamente todo con tarjeta, excepto los souvenirs en los mercados. Hasta café puedes pagar con la tarjeta. Hay datáfonos en todo tipo de comercios y restaurantes. Me fijé en las máquinas por el tema de las clonaciones de tarjetas, pero todo correcto.

Y en cuanto a dónde cambiar, pues vimos bancos y casas de cambio en diferentes zonas que nos movimos, así que tampoco sería más problema. Y en Serguiev Posad cambiamos en un banco y no cobraron ningún tipo de comisión, que en algunos países lo hacen. Al lado del apartamento también teníamos una casa de cambio.

8. Carnet de estudiante y entradas

En algunos sitios tienen descuento para estudiante, con carnet Internacional. En otros también, pero no especifica nada de carnet internacional, así que intenté colar mi carnet de Universidad, puesto que soy PAS… y funcionó donde no exigían el ISIC. Sólo lo rechazaron donde se exigía el ISIC pero, en este caso, ni nuestra hija, que es estudiante, obtuvo el descuento.

Íbamos mi hija y yo y pedíamos 2 entradas de estudiante y 1 adulto. Le dábamos los dos carnets de la Universidad y ni se los miraron en la mayoría de los sitios. Te daban las entradas, luego pasabas por la entrada y nadie miraba nada. En cada sitio turístico indicaré si obtuvimos descuento de estudiante y los precios.

En las taquillas sueles tener los precios y es allí donde te indica lo del carnet ISIC.

Otra cosa a tener en cuenta es que en verano hay las noches blancas. Creo que en San Petersburgo, no me suena que pase en Moscú. Eso simplemente implica que algunos monumentos alargan su horario de visita, incluso hasta la noche. Esto afecta al precio de las entradas. Si vas por la tarde y coincide en este horario extendido, te costarán más caras, pero no hay ninguna diferencia en la visita. Me suena en S. Isaac que cambiaba el precio a 400 en lugar de los 250 que pagamos. Luego la cúpula supongo que también sería precio extra, así que vas sumando sin motivo… Se que pasa en otros monumentos, así que fíjate.

Los precios están muy detallados en las taquillas, hay que leerlos bien.

9. Metro en Rusia

Puedes pagar los billetes de metro individuales, puedes comprar un bono por un número determinado de billetes. O puedes comprar la Troika Card, en el caso de Moscú, que recargas y con la que obtienes el precio del billete a 36 rublos en lugar de a 55. Además sirve para varias personas. Nosotros elegimos esta opción. La tarjeta vale 50 rublos que te reembolsan si la devuelves. Pasamos por la taquilla y le dije Troika Card e hice con los dedos 7. Ella entendió perfectamente que quería gastar 700 rublos. Con la calculadora me enseñó que 50 eran el coste de la tarjeta, cosa que ya sabía, y 650 de recarga. Además también lo puedes pagar con la tarjeta.

Es muy cómodo este sistema de la Troika porque la pasas por el torno cada vez y es muy rápido. Se te va descontando la cantidad y en cada momento ves cuánto te queda. Luego para recargar de nuevo nosotros lo hicimos en las máquinas que hay justo antes de los tornos y también es muy intuitivo y rápido de hacer.

El Metro ruso es espectacular, tanto en Moscú como en San Petersburgo. Estaciones preciosas, grandes, bien cuidadas, limpias, cómodas, servicio rápido y con gran capacidad. La mayoría de las estaciones están rotuladas también en inglés, pero si puedes leer cirílico siempre se será más fácil encontrar tu parada. Me ha parecido todo muy bien señalizado.

La diferencia que he encontrado con nuestro metro es que el nombre de la estación está en la pared posterior, la de la vía, así que si llega el tren te la tapará. Nosotros la tenemos en la zona de espera. Así que quizás tienes que adentrarte en la estación para poder ver el nombre. Los transbordos también muy bien indicados. Y fijarse al entrar en el metro porque si entras por las puertas de salida, los tornos también serán de salida y no podrás entrar. Así que tendrás que buscar cerca las puertas correspondientes.

El precio del metro en San Petersburgo era 45 rublos. Me suena que también había una tarjeta pero aquí lo cogeríamos poco así que no me interesó comprarla.

Metro de Moscú, Rusia.

Metro en San Petersburgo, Rusia.

Alojamiento en Rusia y Estonia

Itinerario por Rusia y Estonia