Dubái y vuelo de regreso (día 20: domingo, 3 de septiembre de 2017)

Con el cambio de vuelo, teníamos todo el día libre ya que no teníamos que ir al aeropuerto hasta la medianoche. Pero como había que devolver el coche de alquiler a las 23h, no nos alargamos más para no tener que pagar otro día de alquiler de coche por un rato. Para hoy nos quedaba el Burj Khalifa.

Así que teníamos todo el día libre para hacer visitas. Los ánimos no mataban de alegría y tampoco queríamos hacer ninguna excursión demasiado cara tras el sablazo extra de los vuelos, que no sabíamos ni si nos devolverían nada de dinero. En teoría también nos lo hubieran pagado, pero de eso me enteré cuando puse la reclamación.

Recogimos el equipaje para dejar las habitaciones antes de las 12 h. Como teníamos el coche, no necesitamos que nos lo guardaran, sino que lo llevamos todo el día en el maletero.

Burj Khalifa

Hoy lo dedicaríamos a ver los exteriores del Burj Khalifa, que ayer no pudimos ver de día con el lío de los vuelos.

El Burj Khalifa es el edificio más alto del mundo, con una altura de 828 metros. En la construcción del edificio participaron 12.000 personas de 30 países. Para comparar, el famoso rascacielos de Nueva York, Empire State Building, hace la mitad que el Burj Khalifa. Se comenzó a construir en 2004 y tardaron casi 6 años.

Una de las atracciones es subir a uno de los dos miradores que tiene:

• planta 124 a 442 metros de altura. El precio es entre 125-200 dirhams, en función del horario.
• planta 148 a 555 metros de altura. El precio es entre 200-500 dirhams, en función del horario.

Nosotros lo descartamos. En Dubái hay esta especie de neblina que dificulta la visibilidad y que parece que todo esté nublado. Y para subir a los miradores es necesario reservar con anticipación, si no no encontrarás sitio. Añadido a que nuestra hija tiene cierto vértigo en puentes y lugares elevados, lo descartamos. El precio es elevado para luego subir y no ver nada. El horario más solicitado es al atardecer, antes de que se haga de noche.

Llegamos hacia mediodía y fuimos directo a los exteriores. No tiene nada que ver el ambiente de día y de noche. Hoy estábamos prácticamente solos. El paseo por los alrededores del lago es muy agradable, si no fuera por el calor… Pillamos el espectáculo de agua de las 13h. Esta vez sí que lo disfrutamos bien, sin que nadie nos tapara… Sigo diciendo que dura muy poco. Creo que 5′.

Fuente de Dubai, en Dubai Mall.

Y casi pasamos aquí el resto del día, comiendo un helado, dando vueltas por el centro comercial y también aprovechamos para comer. Como en otros países asiáticos, en los lujosos centros comerciales tienes los Food Court, donde hay variedad de comida a un precio asequible. Son autoservicios y te llevas tú mismo la comida a una zona de mesas.

Sólo mirar ya es un espectáculo…

Dubai Mall.

Entrada la tarde, fuimos a ver de nuevo el Bur Al Arab, antes de que se hiciera de noche. El ambiente también era diferente que lo que vimos de día. Mucha gente paseando por la playa y pasando el rato…

Burj Al Arab, Dubái

Y a las 19, ya se hacía de noche, y ya cansados ​​del viaje y con el bolsillo vacío, decidimos que se habían acabado las vacaciones. Fuimos tranquilos hacia el aeropuerto a hacer la devolución del coche de alquiler.

Otros gastos del día:

2 pizzas centro comercial: 49 dirhams

Plato de pescado: 25 dirhams

Gasolina: 50 dirhams

Llegada a casa (día 21: lunes, 4 de septiembre de 2017)

Nos quedaban todavía algunas horas por delante para esperar en el aeropuerto. La espera se hizo larga, pero todo llega.

El vuelo salía a las 2 de la madrugada y llegaba a Estambul a las 5.45h y teníamos sólo una hora y media para hacer el cambio de avión. No nos sobró nada de tiempo, pero tampoco nos faltó. Como el equipaje que llevamos es de cabina, no tuvimos que preocuparnos de eso ya que viajaba con nosotros.

Llegábamos a Barcelona a las 10 de la mañana, unas horas antes de lo que hubiéramos llegado con el vuelo inicial, así que teníamos todo el día para descansar porque mañana cada uno a su tarea.

Cabe decir, ahora que he terminado este diario, que recuperamos la mayoría del dinero de los vuelos, aunque no fue fácil y tuve que insistir, pero al mes de febrero los de Budgetair finalmente me dieron la razón de que por un error de sistema no recibí el correo electrónico de cancelación. Parece ser que esto, a veces pasa.

Me zampé la ley del consumidor de la Unión Europea en cuanto a viajes y vi a que tenía derecho. Si te enteras de la cancelación con más de 15 días de la fecha del vuelo, no puedes reclamar nada. Pero a mí no me habían dicho nada en ningún momento. Y, por tanto, me devolvieron el importe de todo lo que reclamé: nuevo vuelo de regreso Dubái-Estambul-Barna, vuelo Praga-Barna que no utilicé porque me cancelaron el primer tramo de Dubái-Praga, llamada roaming, taxi de vuelta a casa, y algunos gastos de comida del último día. Me volvieron todo al céntimo!!!

Si necesitas alargar el hotel, o pasas un día más y gastas en excursiones, comida, etc. también te lo tienen que pagar. Pero nosotros no estábamos por gastos extras así que pasamos el último día de manera muy austera.

Y, terminado el viaje, ha sido el que más incidentes hemos tenido, con diferencia de cualquier otro. Nunca nos había pasado esto. Hemos tenido dos anulaciones de vuelos sin avisar y una cancelación de tren por inundaciones del monzón.

Como ya sabíamos que India es un país que tiene estas cosas, y además íbamos en época de monzón, lo que hace el viaje imprevisible, hicimos un itinerario espaciado de manera que tuviéramos tiempo de reaccionar, y siempre con planes B, como hicimos con el tren, que preferimos volver en avión. Tratamos de estar siempre unos 2-3 días en las distancias largas para superar posibles imprevistos y hacer los cambios necesarios.

El contraste del viaje no puede haber sido más brutal. La extrema pobreza y conformismo de India contrastando con la máxima ostentación y lujo en Emiratos Árabes. Los dos países nos han encantado, partiendo de que no puedes comparar el uno con el otro.

La filosofía y la forma de vida de la India lo tienes que ver por ti mismo y te desaparecerán alguno de los tópicos y prejuicios.

Por otro lado, ver de qué es capaz el ser humano construyendo aquellos exagerados y mastodónticos edificios, tampoco te dejará indiferente, independientemente de que estés de acuerdo o no.

Como ya nos esperábamos… ha sido otro viaje que nos ha encantado, a pesar de los obstáculos con que nos hemos encontrado.

DESEAMOS QUE TE HAYA GUSTADO!!!