Aveiro (día 3: jueves, 5 de enero de 2017)

Hemos tenido un par de días nublados y a ratos con llovizna y a partir de hoy ya sólo tendríamos que tener sol, así que decidimos hacer una excursión a Aveiro, a la zona de playa. A Aveiro le llaman la Venecia portuguesa. La denominación para mí es exagerada porque hay pocos canales, pero el lugar es muy bonito y fue todo un acierto. Nos ha encantado esta visita.

Aquí los trenes más adecuados eran el de las 09:05, que no nos daba tiempo si queríamos aprovechar el desayuno del apartamento, así que el siguiente era a las 10:05, que nos iba perfecto. Llegamos a Aveiro a las 11:12 h. Esta es la dirección con el PDF de horarios de tren actualizados.

Estación de tren de Aveiro, Portugal.

Estación de tren de Aveiro, Portugal.

En un mapa vi que saliendo de la estación había una gran avenida llamada Dr. Lourenço Peixinho que lleva directamente al Canal do Cojo. Cuando sales del tren está indicada esta calle saliendo a la derecha. Si sales a la izquierda también encontrarás una gran avenida, pero irás en dirección contraria al centro.

Nada más llegar al canal ya nos ofrecen el paseo en Moliceiro, embarcación similar a la góndola italiana, un poco más grande y muy colorida. Hay diferentes lugares en el mismo canal donde coger la excursión. Preguntamos para comparar precios y todos valían 8 euros por un paseo de 45′ por 4 de los Canales. Salían cada 15′. En uno de los lugares nos lo rebajaron 1 euro porque ya se iban, pero iba a reventar.

Canales en Aveiro.

Canales en Aveiro.

Nos fijamos en uno de ellos que había sólo una pareja así que decidimos hacer tiempo en las tiendas y, si no subía nadie más, añadirnos a ella. Y así fue. Como ya hacía rato que esperaban, cuando vimos que hacían acción de irse, nos acercamos y tuvimos el Moliceiro sólo para 4 personas.

Paseo en moliceiro, en Aveiro.

Paseo en moliceiro, en Aveiro.

Vimos otros que llevaban unas 30.

Moliceiro lleno de gente, Aveiro.

El capitán era Antonio Banderinhas, según nos dijo, y nos fue explicando los diferentes tipos de barco que había, cuál era su tarea y como lo hacían, y los lugares más importantes por los que íbamos pasando. Originariamente los moliceiros eran utilizados para el transporte de algas, que utilizaban para abonar las tierras de Aveiro. También era para el transporte de pasajeros… El señor era muy agradable y hay que decir que puso muchas ganas y se ganó la propina. La explicación era en portugués pero nos entendíamos muy bien.

Paseo en Moliceiro, en Aveiro, con el capitán Antonio Banderinhas.

El paseo fue muy agradable. La temperatura era de unos 20º así que no lo podíamos haber acertado más. Vimos los diferentes canales y callejuelas y daban muchas ganas de perderse por ellos caminando.

Aveiro

Aveiro

Y así lo hicimos. Los recorrimos y buscamos un lugar para comer. Fuimos a parar a una plaza donde había varios restaurante y como tampoco teníamos mucha hambre, nos decantamos por Nos Tras os Montes, donde había cosas para picar. Pedimos una ensalada de bacalao, sardinas con tomate, una tostada con jamón serrano y queso gratinado y tabla de quesos. Estaba todo buenísimo y nos costó 20 euros.

Restaurante Nos Tras os Montes, en Aveiro.

Restaurante Nos Tras os Montes, en Aveiro.

Con la barriga llena y habiendo paseando por el centro, decidimos rematar con un paseo en bicicleta. Lo habíamos leído en internet y el barquero también nos lo dijo. Junto al mercado municipal, que ya habíamos visto a nuestra llegada, y del canal hay una parada de bicicletas que puedes coger para todo el día. Nosotros sólo queríamos probar la experiencia porque estábamos oxidadas con esto de la bici, y aprovechando que el paseo al lado del canal se prestaba y el día también. Con dejar un documento de identidad es suficiente. Fue todo un acierto. Hay que decir que las bicis estaban bastante destartaladas, casi no frenaban y la cadena se atascaba a menudo, pero fue muy divertido. Y que más puedes pedir por un servicio así gratuito!!

Pues con esto dimos la visita por terminada y decidimos tomar el tren de las 16:19h. Los trenes de vuelta pasaban a y 19′ de todas las horas. Sólo nos quedaba hacer una parada de shopping en Lefties, cadena de ropa que habíamos visto al llegar que tenía buenos precios y, encima, estaba de rebajas; y comprar una baldosa muy bonita de Aveiro que nos había gustado en una tienda de regalos justo delante de la estación.

Así que tuvimos que espabilar y llegamos a tiempo. El viaje de vuelta se pasó muy rápido y llegábamos a Oporto a las 17:25 h. Volvemos al apartamento a descansar hasta la tarde.

Esta noche tenemos ballet. En el Coliseo de Oporto hacían el Cascanueces precisamente ese día, así que había comprado entradas. Fuimos tranquilamente andando. El Teatro está un poco viejecito pero estábamos en muy buen lugar y valió la pena. No habíamos visto ballet y nos encantó. Además, los precios son más asequibles que los del Teatro del Liceo. Así que si tienes la oportunidad, mira si puedes aprovechar algún espectáculo. La obra comenzaba a las 21.30 h. Fuimos con tiempo… Y terminó a las 24h.

El Cascanueces, en el Coliseo de Oporto.

El Cascanueces, en el Coliseo de Oporto.

El Cascanueces, en el Coliseo de Oporto.

No quisimos cenar antes porque no teníamos hambre y al salir no había mucha cosa abierta, más que bares de copas. Como de camino teníamos el McDonald’s emblemático que había visto en fotos, fuimos a ver si estaba abierto y efectivamente estaba lleno. Así que aprovechamos para comer algo antes de ir a dormir.

McDonald’s en Oporto.

Plaza de la Libertad, Oporto.

 

Día 4: Torre de los Clérigos y Catedral. Vuelta a casa por la noche