Serguiev Posad, anillo de oro (día 6: lunes, 20 de agosto de 2018)
Hoy es nuestro último día de Moscú y por la noche cogeremos el Flecha Roja hasta San Petersburgo. Pasaremos el día en Serguiev Posad.
Para conocer la Rusia más rural, es muy recomendable realizar una visita a alguna de las ciudades del Anillo de Oro de Moscú. Serguiev Posad está situada a unos 70 kilómetros al nordeste de Moscú y conocida por albergar el Monasterio de la Trinidad y San Sergio (Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO). Es una ciudad de unos 110.000 habitantes, ideal para hacer una excursión de 1 día por su cercanía a Moscú y por la cantidad de trenes y autobuses que conectan directamente con la ciudad.
Su Monasterio de la Trinidad y San Sergio es uno de los lugares más sagrados de Rusia puesto que en el mismo todavía habitan los monjes ortodoxos. Algunos lo llaman el “Vaticano ruso”.
Como ayer nos acostamos tarde y hoy tenemos todo el día hasta las 12 de la noche que no cogeremos el tren y se hará muy pesado, pues no hacía falta madrugar tanto. Serguiev Posad está a una hora y media en metro. La visita se puede hacer en un par o tres de horas.
Hemos salido a las 10.15h del apartamento. Hemos hecho bocatas para el desayuno y nos los comeremos en el tren. Cogemos el metro en la L7 Pushkinskaya, al lado del apartamento, haciendo transbordo en la L1 hasta Komsomolskaya. A la salida ya vemos la estación de Leningradsky. Nada más entrar ya están indicadas las taquillas para dejar el equipaje, que recogeremos por la noche. Hay taquillas pequeñas y grandes. Nos caben las 3 maletas y la bolsa de souvenirs en la misma taquilla. El precio fueron 1000 rublos que hay que pagar en efectivo y presentar el pasaporte.
Para ir a Serguiev Posad el tren se coge en la estación de Yaroslavsky, que está justo al lado de Leningradsky, saliendo a la izquierda, dos edificios más allá.
Nos ha costado un poco comprar el billete. Nada más entrar en la estación había una ticket office, donde había un par de colas con poca gente, que no había forma de que avanzaran, y allí hemos estado unos 20′ haciendo cola. Y luego ha resultado que estas no eran. Hay que cruzar todo el edificio y salir al exterior. Allí hay otra ventanilla y lo hemos comprado enseguida y sin problema. El horario ha coincidido con el que teníamos y con el tiquet tienes que pasar por los tornos y ya verás indicada la vía, todo muy fácil. Nos ha preguntado la señora si también queríamos la vuelta, así que ya lo hemos dejado rematado. Ninguna dificultad para entendernos… todo genial y fácil.
Puedes elegir entre coger un tren express o uno suburbano. Trenes express sólo hay unos 4 al día, y tardan unos 20′ menos que el suburbano, que tarda hora y media larga. Evidentemente paran menos, pero el precio también es muy diferente. A nosotros nos ha costado 320 rublos por persona ida y vuelta. El express vale unos 700 rublos por trayecto!!!
Había quien se quejaba del ambiente del suburbano, pero a mí esto me pareció auténtico, lleno de gente y con sus distintos vendedores: revistas, cepillo de dientes, pañuelos, comida, bolsas, músicos… El viaje es muy cómodo, eso sí coge sitio para sentarte… porque a la ida el tren iba a los topes. A la vuelta había menos gente.
Nosotros buscamos los horarios por internet. A primera hora pasaban cada 10-20′, pero más al mediodía había menos, así que nos fue muy bien afinar el horario. Hemos cogido el de las 12.02 que llegaba antes de las 14h. El anterior había sido a las 10.22, así que te puedes estar mucho rato esperando si no aciertas con el horario.
Cuando llegas a Serguiev Posad tienes que salir a la calle principal y girar a la derecha. Enseguida verás las torres a lo lejos. Es un agradable paseo de unos 15-20 minutos.
Llegamos hacia las 14h. Había gente pero en un rato se fue vaciando. Está claro que eran los que habían llegado por la mañana temprano. No hay que pagar nada a la entrada.
Vimos la Catedral de la Trinidad, la Catedral de la Asunción, el campanario…
Nada masificado, sin agobio… Las iglesias preciosas tanto por dentro como por fuera. Además se podía hacer fotos en el interior y hemos estados menos de dos horas para hacer la visita, tranquilamente. Ha sido de lo mejorcito que hemos visto en Moscú. Incluso sustituiría la visita de la Plaza de las Catedrales por esta visita. Nos ha encantado.
Hemos decidido comer algo cerca de la estación porque hemos visto que había restaurantes, en un McDonald’s.
Hemos cogido el tren a las 17.52 que nos ha llevado a Moscú a más de las 19h. Hacía fresquito así que hemos buscado un sitio para apalancarnos lo que queda de tarde. Allí al lado había un Burger King, con sofás, wifi, enchufe, así que hemos estado cómodos. Hemos ido consumiendo durante la tarde. En la plaza que hay aquí fuera hay otra de las Siete Hermanas, el hotel Leningrado, así que hemos aprovechado para acercarnos a verlo.
El tren Flecha Roja sale a las 23.55 h. Hemos recogido el equipaje, hay que pasar un control de seguridad y hemos esperado en el andén. Hay mucho movimiento de trenes nocturnos a esa hora. Ha llegado una media hora antes. En la puerta de cada vagón tienes el responsable vestido para no desentonar con el tren. Te piden el pasaporte, no hace falta el billete físico y te buscan en la lista.
Nosotros elegimos viajar en primera clase. En este caso los camarotes son dobles. El respaldo del asiento se baja y tienes la cama montada, con cojines y almohadas mulliditas. En la mesita tienes botellita de agua, plato con fruta cortada, bollos de pan, tableta de chocolate… Te ofrecen también dos zumos por persona. Además hay un quid de uso personal con zapatillas, cepillo de dientes… El espacio para las maletas está debajo de la cama. Al final del pasillo está el baño.
Luego el responsable pasa a preguntarte qué quieres para desayunar, que está incluido. Había crepes con salmón, arroz con leche y revuelto de setas. También puedes elegir entre queso o embutido, para el pan. Y además tienes té gratis y café de pago.
Es una pena no poder disfrutar de todo esto con más tranquilidad. A esa hora ya estás cansado y te vas a dormir lo antes que puedes. A mí me pareció todo comodísimo. Te sientes como en un cuento de hadas. Me costó un poco de dormirme por los nervios, pero me pareció comodísimo aquel cojín y la colcha tan blandita. Dormí toda la noche del tirón.
Otros precios del día:
Coca cola: 58 rublos
Cerveza: 130 rublos
Consigna: 1000
Metro: 113 rublos
Tren a Serguiev Posad: 176 rublos x 3 pax x 2 trayectos
Comida en McDonalds: 795 rublos
Merienda en Burger King: 490+335 rublos
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