Mercados de Sofía y últimas compras (Día 4: sábado 20 de abril de 2019)

Hoy volvemos a casa. El avión sale a las 15.55h así que tenemos toda la mañana para hacer visitas. Teníamos pensado visitar la Iglesia de Boyana, que está a las afueras de Sofía y es patrimonio de la Unesco. Parece que hay 2 autobuses que te dejan allí, los autobuses 64 y 107. Según el buscador de transporte público tardábamos unos 45′ en llegar. Pero no me quedaba claro cuál de las paradas que había que se llamaban Iglesia de Boyana era la que nos teníamos que bajar.

Además, buscando información decían que estos autobuses tenían muy poca frecuencia y como nuestro tiempo hoy era limitado, nos surgieron dudas de si ir a ver la Iglesia o no. Tampoco se pueden hacer fotos en el interior y debido a su reducido tamaño, las visitas se hacen en grupos de unas 10 personas para evitar las aglomeraciones. Y si íbamos y estaba lleno de gente… Total, que no nos convencía mucho, ya habíamos visto Rila y cambiamos la visita.

Primero de todo fuimos a desayunar de nuevo al Costa Café. Un zumo de naranja natural de medio litro, te y pastas nos costó 7€.

Desayuno en Costa Caffé.

Nos quedaron los mercados por ver y teníamos que comprar souvenirs, así que dedicaríamos la mañana a pasear tranquilamente por Sofía y hacer las últimas compras.

Empezamos por el Mercado Central. Sabíamos que existía, estuvimos en frente y ni lo vimos. Está justo en frente de la Mezquita, entre la Mezquita y la Sinagoga. No es muy grande y está bien cuidado. Nos gustó. Incluso hay alguna tienda de souvenirs que merece la pena. Dicen que el restaurante que hay en la planta baja también está bien de precio. A nosotros no nos encajó por horario, así que no lo probamos.

Mercado Central de Sofía, Bulgaria.

Más adelante tenemos el Mercado de las Mujeres, lleno de puestos donde venden frutas y verduras, con ambiente más local.

Y, para terminar, nos quedaba el mercado que está en frente de la Catedral, que habíamos visto el día que la visitamos, pero que pensamos que era sólo de iconos religiosos y nos lo saltamos. Además de objetos religiosos hay alguna parada de souvenirs y el resto son mayormente de objetos de la guerra incluso muchos con simbología nazi, lo cual nos impactó. Medallas, sombreros, espadas con esvásticas campan a sus anchas en este mercado, además de objetos antiguos.

Aquí compramos una bola de nieve tamaño pequeño por 5 levas, que fue el precio más barato que encontramos.

Y ya fuimos hacia la calle Vitosha a por el resto de souvenirs que era donde estaban mejor de precio y nos habían gustado más. Incluso en el metro eran mucho más caros.

El apartamento lo teníamos que dejar a las 12h, pero dejamos todo recogido por si venían a limpiar. Nos alargamos hasta casi las 13h. Recogimos las maletas, dejamos la llave dentro y como era muy justo para entretenernos a comer, decidimos hacer nuestra última cuña de pizza, que nos comimos en uno de los bancos de la calle Vitosha, aprovechando que hacía un magnífico día soleado.

Boulevard Vitosha en Sofía, Bulgaria.

Y de nuevo al metro Serdika hasta el aeropuerto, mismo camino que habíamos hecho a la ida. Aquí se nos acababa de ir el metro y el siguiente pasaba en 12′. A pesar de que recibimos un aviso de Ryanair de que fuéramos con tiempo porque había colas en los controles en Sofía, con menos de 2 horas tuvimos tiempo sobras de hacer las últimas compras en el aeropuerto, a pesar de que sólo hay un par de tiendas no muy grandes. El aeropuerto de Sofia es muy pequeño y el control de seguridad fue rápido. Embarcamos y llegamos con puntualidad.

Sofía desde el aire…

Sofía es un destino que no gusta a mucha gente. A nosotras nos ha gustado, sobre todo porque no está tan masificado de turistas y es un destino más alternativo. Está claro que es una ciudad que requiere de inversión porque hay muchos edificios, calles y carreteras en mal estado o abandonados. Y tampoco es fácil para personas con movilidad reducida puesto que no hay dos baldosas al mismo nivel.

Pero es una ciudad alternativa, tiene muchas pintadas y dibujos por todas partes, es muy económica, apenas gastas dinero en entradas, y sobre todos, tiene unos espacios abiertos muy cuidado y utilizados. Hay muchos parques, la jardinería despunta y están llenos de gente. Además, sus monumentos son muy variados y curiosos.

Aprovecha ahora para visitarla puesto que nos decían que en un par de años se pasarían al euro y probablemente, ya sabemos cómo nos afectó a nosotros el tema del redondeo, los precios no serán los mismos.

Información sobre la Iglesia de Boyana

A pesar de que al final no fuimos, te dejo la información. La Iglesia de Boyana ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y está situada en el distrito residencial de Boyana, en las afueras de Sofía, a los pies del monte Vitosha.

Es una pequeña iglesia ortodoxa medieval del siglo XI que es célebre por los frescos que decoran las paredes interiores del templo.

El origen de los frescos se remonta al año 1279 y en ellos se plasman escenas de la sociedad de la época y están contabilizadas 240 figuras humanas, entre ellas las más logradas son los retratos del Zar Constantino y su esposa la Zarina Irina y el Zar Kaloyan (en el ala Norte). También hay en el atrio 18 escenas de la vida cotidiana de los artistas, así como representación de Santos, especialmente de Ivan Rilski, el fundador del Monasterio de Rila.

Se desconoce el autor de la obra pero se supone que procedía de la escuela de Veliko Tarnovo.

Si visitas la iglesia de Boyana encontrarás más información de la historia del templo en el museo anexo. Las visitas al interior del templo están restringidas y se hacen sólo acompañados de un guía. Se hacen en grupos de 8 personas para preservar las pinturas.

Precio: 10 leva (aproximadamente 5 euros) para la Iglesia Boyana (se puede pagar por adelantado en línea)

Localización: Calle Boyansko Ezero, 1-3. Se puede llegar en taxi, unos 10 BGN aprox. También se llega con los buses 107 y 64.

Horarios: Visitas de 9:00 a 17:30 horas.

Otros gastos del día:

Imán: 2,5 levas

Bola de nieve pequeña: 5 levas

Servilletero de madera: 6 levas

Tarro de miel 80 gr: 6 levas