Hoy es nuestro último día, el viaje ha llegado a su fin!! Y nos quedan algunas visitas imprescindibles que nos habíamos marcado… básicamente en lo que es la Isla de Hong Kong.

Nos hemos dejado muchas cosas pendientes en Hong Kong: haber visto más mercados; los parques, estábamos justo frente al Kowloon Park y ni lo pisamos; subir al Pico; las escaleras mecánicas; pasear por la zona financiera… por nombrar algunas. Y haber disfrutado más de la bahía, que nos encantó!!

Recogimos el equipaje y lo dejamos en la sala común. No hemos visto a nadie en los 4 días y allí hay varias cámaras, así que todo correcto.

Avenida de las Estrellas

Vamos a empezar por pasear por la Avenida de las Estrellas, que sólo la habíamos visto de noche. Esta avenida es la versión china del Paseo de la Fama de Hollywood, pero con los nombres de actores locales. Las estrellas que más fotos reciben son la de Jackie Chan y la de Bruce Lee, así que había que llegar hasta la Estatua de Bruce Lee y encontrar las manos de Jackie Chan.

Por supuesto, nos vamos andando, un lujazo teniendo el hotel tan cerca. Hoy es domingo, nos hemos levantado sin despertador… y Hong Kong aún duerme. No son ni las 9 cuando llegamos a la Avenida, hace un día espléndido, tras la lluvia de ayer, y sólo hay alguna persona haciendo deporte.

Sin duda vale mucho la pena pasear por la Avenida de día, todo tan cuidado… Es espectacular.  La estatua de Bruce Lee parece que la van cambiando de ubicación, nosotros la encontramos cerca de un Starbucks, hubo que andar un rato más. Nos hubiera gustado llegar más lejos, pero no hay más tiempo.

Cruzar la bahía en el Star Ferry

El siguiente imprescindible era cruzar la bahía en el barco Star Ferry, que tiene servicio de barco de línea y cuyo trayecto dura sólo 5’ y hace el transporte de pasajeros en ferry desde 1888. Va de un lado de la bahía al otro, o sea, desde Kowloon hasta la Isla de Hong Kong y nos costó 6,5 HKD. Teníamos marcado el punto de la parada de ferry en MapsMe y acertamos. Hay que ir hacia la derecha, se pasa por una zona cubierta y hay que seguir un poco más e ir como al interior de un edificio. Por allí ya vimos indicadores y hay que elegir entre 2 rutas: una va a Central, que es donde íbamos nosotros y está justo en frente; o la otra opción va a Wan Chai, que está más al Oeste.

Los billetes ya no sólo se compran en las máquinas expendedoras, que a nosotros con la tarjeta no nos dejaba y nos avisaron desde la taquilla; y tampoco hay que pagar en efectivo. Nosotros pagamos con la contactless, justo en el torno de entrada, y aquí sí que la pudimos pasar 2 veces. No se podían comprar los 2 billetes a la vez. El mismo señor que nos indicó fue el que estaba luego en el barco. Los ferris salen constantemente. Esperamos en la sala de espera pero ya venía uno del otro lado, así que enseguida subimos.

El paseo es muy agradable y se llega antes de lo que nos gustaría. Allí fuimos a salir justo al lado del centro comercial IFC Mall y eso nos dio una genial idea!!

Como ya estamos 100% recuperados, y nos quedaron un par de restaurantes donde hubiéramos cenado pero que desistimos por si acaso, decidimos probar suerte con uno de ellos.

Desayunando en el Tim Ho Wan, estrella Michelín

Parece que es un restaurante muy famoso en Hong Kong y además el más barato del mundo con una Estrella Michelin. Lo teníamos justo al lado y tuvimos una genial idea!! Por que no íbamos a desayunar, o a mirar si estaba abierto? No eran ni las 10h, y fuimos a parar a un pasillo que indicaba el acceso al IFC Mall, así que todo nos iba de cara. El restaurante está dentro, no en la calle.

Nada más entrar le preguntamos al vigilante y nos indicó para abajo. Hubo que bajar las mecánicas, sólo un tramo, si sigues bajando vas al metro. Luego seguimos recto y hubo que bajar otras mecánicas y a pocos metros a la izquierda diría que ya llegamos.

Que grata sorpresa!! No era para nada como nos lo esperábamos. Habíamos leído que era recomendable pero que siempre había muchas colas, que el personal era poco amable, que el papel para apuntar era una mala fotocopia, que la vajilla era de plástico… Nos imaginábamos tipo puesto callejero como algunos que hemos estado comiendo en China, pero no tiene nada que ver. Es el típico restaurante de centro comercial, todo muy limpio y organizado y no muy grande, pero la impresión a primera vista no pudo ser más buena, y fue muy diferente a cómo lo esperábamos.

Y la comida excepcional. Aquí lo que pasa es que el lugar es pequeño, cabrán unas 60-80 personas, las mesas son de 4, están muy juntas, y si no la llenáis, es fácil que toque compartir, pero para nosotros no era ningún problema. Nos sentaron con un chico que, además, viéndonos perdidos en nuestra elección, nos recomendó qué pedir en la carta, que además tiene fotos de la comida. La carta no es muy extensa y lo marcas allí mismo. Los platos valían entre 20-40 HKD, cuando ayer sólo la pizza ya nos costó más de 100.

Pedimos 4 platos y luego otros 2 más, con la idea de que nos sobrara comida para luego, que iba a ser nuestro almuerzo antes de ir al aeropuerto, junto con la pizza que sobró anoche. Pedimos dumplings de cerdo y dumplings de gambas, a cuál más bueno. Y una especie de canelones también de gambas… Luego repetimos de dumplings y una especie de bollos con relleno dulce.

Nos encantó todo y algunos de los platos que vimos pasar nos quedamos con las ganas de probarlos. Nos costó 229 HKD, o sea 27€ los 6 platos + los tés que tienen varias opciones y valían unos 15 HKD cada uno. El Pizza Hut nos costó 63€. En ambos casos pedimos comida para que sobrara.

Una pena que no hubiéramos venido antes como teníamos previsto, porque hubiéramos comido aquí cada día. En el Star Ferry se llega en un plis plas y estuvimos muy a gusto.

Con la barriga llega, nuestro siguiente destino fue todo un descubrimiento.

Misa en la Sky City Church, piso 75 del Edificio Central Plaza

Habíamos pensado en subir a algún rascacielos para ver las vistas desde algún piso elevado. Algunos tienen miradores, pero son caros; había opciones gratuitas como el Banco de China, que parece que ya no funcionan; siempre queda la opción de tomar un café o una copa en alguno de los bares ubicados en las plantas altas, pero tenían códigos de vestimenta estrictos para la ropa de verano de ellos… así que habíamos descartado todas las opciones. Y encontramos esta iglesia en el piso 75, su último piso en el edificio Central Plaza, mucho más alto que las opciones que barajábamos, un edificio con 374m. de altura.

Después del desayuno, cerca de las 11h, pusimos rumbo al rascacielos Centra Plaza. Cogimos el metro allí mismo en el centro comercial hasta Chai Station, a 1 parada, y tomamos la salida A1. Toda esta zona es la City, el distrito financiero, con altísimos rascacielos, grandes avenidas y muchos puentes peatonales para poder cruzarlas. Así que el puente que hemos cogido nos ha llevado directamente a uno de los accesos del edificio y luego sólo hubo que seguir las indicaciones hacia la recepción.

Ya había un cartel indicativo de la misa, así que íbamos bien. Nos hicieron poner un identificador conforme íbamos a la iglesia y allí empezamos a coger diferentes ascensores puesto que no se llega arriba de golpe. Había botones que nos iban indicando. Fuimos bajando en diferentes plantas y nos íbamos acercando al piso 75. Es un edificio muy clásico, lujoso y elegante, todo muy glamuroso, con grandes espacios en todos los rellanos, éramos media docena de personas en el ascensor. Creo que hemos cogido 3 tramos de ascensor y aquí sí que nos hizo cosquilleo en la barriga, no como el ascensor Bailong.

Cuando llegamos la misa ya había empezado, eran más de las 11h y había más de 100 personas cantando, tipo misa Gospel, y en el “escenario” había 7 músicos y personas cantando. También hay pantallas, con la letra escrita, para que puedas seguir tipo karaoke. Ha sido muy emocionante estar allí arriba, nos hemos contagiado del ímpetu de la gente, la última planta es como una pirámide, el techo es muy alto, así que la acústica era muy buena y nos hemos fundido con el entorno.

Y las vistas 360º son brutales!! Ya lo fuimos viendo cada vez que bajábamos en las diferentes plantas. Hacía un precioso día soleado, así que reflejándose el sol en el agua los colores aún eran más espectaculares. Fue muy emotivo. Cuando acabó el rato de cante, hicieron una misa, conectando con alguien online que dio el sermón a través de las pantallas. Estábamos tan alucinados con las vistas y el entorno que nos zampamos toda la misa. Acabada, hubo otro rato de cantos, como si de un concierto se tratara y luego nos quedamos otro buen rato por allí haciendo montones de fotos. Las vistas son 360º y nos fuimos ya porque aún nos quedaba otra visita que hacer, que si no empalmamos con la misa en cantonés.

El Central Plaza es actualmente el tercer edificio más alto de Hong Kong. A diferencia del 99% de los edificios, el Central Plaza tiene una planta de forma triangular para optimizar las vistas de la bahía. En su parte superior tiene instalada una aguja de 102 metros de altura.

Como no podía ser de otro modo, la «Sky City Church» es la iglesia más alta del mundo. Hacen misa los domingos a las 11h en inglés y a las 14h en cantonés. Esta es su web oficial.

Todos fueron muy amables con nosotros preguntándonos de dónde veníamos y ofreciéndonos constantemente sillas para que nos sentáramos, pero no podíamos dejar de vivir el momento. Para nosotros se convirtió en la mejor visita que hicimos en Hong Kong y en un imprescindible. Sin duda, si algún día volvemos a Hong Kong, intentaremos ir en domingo para repetir la visita.

Y en la iglesia se nos hicieron las 13h. Nuestro último destino del día era el edificio Montser Building, una fricada que metimos en el itinerario.

Monster Building

Este edificio es un lugar curioso que ver en Hong Kong que no suele aparecer en guías ni blogs, pero que Instagram ha hecho famosos después de aparecer en una de las películas de la saga Transformers.

El Monster Building es un complejo de 5 grandes bloques de pisos interconectados que desde el patio inferior dan una sensación de densidad extrema. Está situado en la zona Quarry Bay, uno de los barrios con más densidad de población del mundo con grandes bloques de edificios con decenas de piso de altura.

También lo teníamos marcado en MapsMe y llegamos en el Metro hasta Quarry Bay. Es alucinante lo pequeño que se ven los espacios y las ventanas llenas de ropa colgada.

Por la zona también había algún mercado por el que paseamos, también entramos a ver los supermercados, que nos gusta hacerlo y no habíamos tenido tiempo. Y ya dimos nuestra visita a Hong Kong por terminada. Cogimos el metro hasta el hotel y ya eran las 15h.

Primero paramos a ver la mezquita, con la que tan silenciosamente habíamos compartido espacio. Se escuchaba que estaban rezando, nos descalzamos y entramos. Pero sólo había las mujeres y el imán. Yo no me cubrí la cabeza, nadie me dijo nada. sólo nos miraban y reían. En la sala no cabía ni un alfiler, así que nos quedamos en la puerta. Fuera, en el porche, había mujeres de charla en el suelo y en la puerta de la calle había algunos hombres vendiendo comida. La mezquita por dentro no es nada espectacular, pero después de 4 días de verla por fuera, nos apetecía verla por dentro.

Y ya en el hotel, tras comprar bebida en el 7Eleven que teníamos abajo, en la misma zona común aprovechamos para comer los restos de pizza y nuestra comida Estrella Michelín. Menudo manjar!!

Para ir al aeropuerto se puede ir en el Airport Express, pero hay que hacer cambio de estación y transbordo largo. Así que como ya conocíamos el bus A21 con el que fuimos al puente de Macao, hicimos la misma ruta. Quizás tarda un poco más, pero no hay que andar nada e íbamos con tiempo de sobra. De nuevo hemos pagado 37 HKD por los 2, o sea un par de euros por persona. No he acabado de entender cuál es el pago, no todos hablan inglés, pero no puede haber salido más barato.

A nuestra llegada al aeropuerto había que pasar por facturación, a pesar de no querer facturar, porque así lo exigen, como ya nos enteramos a la ida, pero además porque sólo teníamos los asientos reservados hasta Pekín. No hubo manera de reservar por internet el tramo largo. Cuando llegamos no había casi nadie en las filas de facturación y, con nuestros asientos ya asignados, solo nos quedaba esperar.

A quien le interese, el tabaco en el aeropuerto sale a mitad de precio y aunque nos dijeron que en España sólo permitían 1 cartón por persona, no 2 como en la mayoría de sitios, luego en España nadie preguntó nada, así que podíamos haber traído 4 paquetes en lugar de 2. En cambio, en las tiendas de HK el paquete, no el cartón, costó 12€, fuera la marca que fuera, nunca habíamos pagado tanto por un paquete de tabaco!! Así que afinar si se viene desde China, que allí es más barato.

Los controles fueron a través de los tornos que leen los pasaportes biométricos, muy rápidos.

Nuestro vuelo salía a las 20.15h vía Pekín, a donde llegábamos cerca de las 12 h de la noche. En el control de seguridad de Pekin nos hicieron desmontar la bolsa adicional que llevamos de souvenirs por el tema de las baterías. Hay que sacar todas las baterías que lleves. Si no, te las harán sacar. Nosotros compramos una, que no recordábamos, y que hubo que desmontar la bolsa para sacarla. Y otra que llevábamos y que no nos funcionó, por eso compramos la otra, y también hubo que sacarla porque las veían por el escáner. En este control de Pekín estuvimos un montón de rato porque hacían desmontar todas las maletas. Supongo que a más gente les pasaría como a nosotros.

Luego teníamos una escala de cerca de 3 horas e íbamos a llegar a Barcelona hacia las 8 de la mañana, justo para ir a trabajar!!

El viaje a China ha sido increíble!! Siempre el último destino parece que es el que más gusta, pero China seguro que nos va a dejar huella. Es un país que no nos importaría repetir… y más ahora que ya somos expertos en movernos por allí!!!

Un viaje a China por libre no es tan difícil como puede parecer. Pero si te aprovechas nuestros recursos, ahorraras tiempo de preparación. Estos son nuestros recursos de China que puedes encontrar en nuestra shop de Ko-fi:

  • Hoja exhaustiva de gastos.
  • Guía del viaje en varias partes (Beijing a Xi’An, Chengdu a Shenzen, Macao y Hong Kong) porque al ser tan voluminosa que hemos tenido que partir el fichero en partes. La tienes en Word, para tu propio uso, y en pdf. Es la información que buscamos antes de viajar: datos culturales, horarios, precios… También incluye un documento extra de transportes, con toda la información sobre las estaciones de tren, metro, etc.
  • Nuestras direcciones de MapsMe: para nosotros es la parte fundamental del viaje y la que se lleva más tiempo preparar. Hay más de 400 puntos para China y más de 100 para Hong Kong y Macao.
  • El diario del viaje, este documento que es el que hacemos a la vuelta, con toda la información actualizada, ya que a veces no toda la información de la guía acaba siendo correcta. También me gusta hacer hincapié en los tiempos necesarios para cada visita.