Vuelo a Singapur y por la noche vuelo a casa (día 23, viernes, 27 de julio de 2018)

Hoy me tiraré todo el día volando. A las 12.55h sale el vuelo hacia Singapur. Para ir al aeropuerto que esta vez no era el de Phuket sino el de Krabi, contraté un transfer que era una minivan que la puedes contratar en los hoteles y agencias de viajes. Yo lo contraté en una agencia de viajes, fue muy puntual y me vino a recoger al hotel.

El aeropuerto de Krabi es muy pequeño así que los trámites fueron muy rápidos. Llegada a las 16h a Singapur y hasta las 23.15 h sale el vuelo internacional, así que tengo toda la tarde en el aeropuerto. Ya se que es un palo pero con los vuelos intercontinentales no te la puedes jugar. O vas con horas de antelación para tener tiempo de reacción si falla algún vuelo, o duermes en el destino, así que no hay más.

De todas formas el de Singapur es un aeropuerto muy cómodo y con muchas posibilidades.

Otros precios del día:

Transfer aeropuerto: 150 bhats

Llegada a Londres y vuelta a casa (día 24, sábado, 28 de julio de 2018)

El vuelo con British llegaba a Londres a las 5.50h de la mañana. Cuando reservamos, hacía una escala corta, pero desapareció y había mucha diferencia de precio, así que no me quedó más opción que quedarme todo el día en Londres, hasta las 19.50 h que salía el vuelo a Barcelona.

Como Londres ya lo conozco, y al final del viaje llega uno ya muy cansado, reservamos una habitación cerca del aeropuerto, y allí me tiré el día. No los recomiendo porque la comunicación con ellos fue nula. Reservamos con Airbnb y en el momento de hacer la petición les dije que llegaba a las 6 de la mañana y que sólo quería dormir, que hacia las 14-15h me iba. Y me la aceptaron… Unos días antes les escribí de nuevo para ver que seguía todo en pie y me dijeron que era muy pronto, pero ya no conseguí aclarar con ellos qué era muy pronto??

Llegué y no había nadie. Les llamé por teléfono y me dijeron dónde encontrar la llave y cuál era mi habitación. Abrí una puerta y había gente durmiendo… Tuve que buscar toallas para ducharme.  En fin, un poco desastre todo. Por suerte, estaba muy bien comunicado con el aeropuerto con un autobús.

En el autobús se puede pagar directamente con tarjeta contactless, para evitar ir comprando bonos de transporte. Compré algo para comer así que el día lo pasé durmiendo y descansando. Había retrasos en Londres, pero al final el avión salió más o menos a la hora prevista y llegamos a Barcelona con no mucho retraso.

Sabía que Vietnam me iba a gustar, pero no esperaba que tantísimo. Y en cambio, Tailandia que lo puse de relleno, a sido mi gran desconocido. Ambos países muy recomendables. Fantástico viaje!!