Josefov, el barrio judío (día 3: 22-1-23, domingo)

Tras otro buen desayuno en el hotel, empezamos el día sin nieve. Para hoy teníamos el barrio judío.

Josefov está ubicado al norte de la Ciudad Vieja, menos de 10 minutos caminando de la Plaza. Fue el barrio que se originó cuando las dos comunidades judías que había en Praga en la Edad Media se unieron gradualmente. Inicialmente, una comunidad estaba asentada alrededor de la Sinagoga Staronová (Vieja-Nueva) y la otra en la Sinagoga Española. Tras años de discriminación, el Barrio Judío se integró en Praga en 1850. A finales del siglo XIX, las autoridades reformaron totalmente la zona conservando sólo las sinagogas, el cementerio y el ayuntamiento.

El nombre de Josefov es un tributo de los judíos a José II, gobernante que comenzó a integrar a los judíos en la ciudad de Praga. Durante los siglos XVI y XVII y debido a las acusaciones de los cristianos, todos los judíos debían llevar un identificativo amarillo.

Qué ver en Josefov:

  • Las seis sinagogas judías: las que se pueden visitar son la Alta, la Española, Klausen, Maisel, Pinkas y la Vieja-Nueva.
  • Antiguo Cementerio Judío: una de las imágenes más impactantes de Praga, con una gran cantidad de tumbas.
  • Ayuntamiento del barrio Judío: fue construido a finales del siglo XVI y ha sufrido varias remodelaciones, la última en el año 1908.
  • Monasterio de Santa Inés: En su interior se encuentra un pequeño museo alrededor del claustro.

Las seis sinagogas

Horario desde noviembre hasta marzo de: 9:00 a 16:30 horas. Los sábados cerrado, ya que es el Sabat, el día sagrado para los judíos.

Precio adultos: 350 coronas. Precio estudiantes: 250 coronas. Con la Prague Card la entrada es gratuita. La entrada sirve para las seis sinagogas y el Cementerio judío. Nosotros dijimos que éramos estudiantes los dos y no nos pidieron ningún tipo de documento para acreditarlo.

Se puede comprar la entrada en cualquiera de ellas, lo que es recomendable, ya que en el cementerio siempre hay más cola. Nosotros la compramos en la Sinagoga Española, que también había un poco de cola, ya que es de las más importantes. Con la entrada nos dieron un mapa de las cosas que podemos visitar. Yo aún estoy estudiando, así que como las chicas de delante compraron entradas de estudiante y no les pidieron nada, nosotros hicimos lo mismo.

Empezamos la visita por la estatua de Kafka, que está al lado de la Sinagoga Española. Nos gustó mucho la visita de la Sinagoga Española. Nos pareció un poco tétrico, pero estuvo bien e interesante. Vimos todo en aproximadamente hora y media/dos horas.

Estatua de Kafka en el barrio judío de Praga.

Sinagoga Española

Fue construida en 1868 y recibe el nombre de “Española” por su decoración morisca, que tiene un parecido a La Alhambra de Granada. En el interior hay una exposición sobre la vida de los judíos en las últimas décadas. Ya nos lo habían dicho, que esta era la más bonita y a nosotros fue la que más nos gustó, es la más recargada y muy colorida. Tiene dos plantas y se puede subir a la de arriba.

En todas las sinagogas hay un poco de exposición, museo, objetos de aquella época y está explicado la vida en los guetos…

Sinagoga Española en el barrio judío de Praga.

Sinagoga Pinkas

Fue fundada en 1479 y está situada en la entrada del Cementerio Judío. La sinagoga Pinkas es una de las más famosas y es la siguiente que visitamos. En sus paredes están inscritos los nombres de los 77.297 judíos checoslovacos asesinados por los nazis. Es muy impactante. También hay una amplia colección de dibujos hechos por niños que estuvieron en el campo de concentración de Terezín.

Sinagoga Pinkas en el Barrio judío de Praga.

Sinagoga Alta

Construida en el siglo XVI y financiada por Mordechai Maisel, la sinagoga Alta tiene dos plantas: en la planta alta alberga una colección de telas, cortinas y objetos de plata, mientras que en la planta baja hay una pequeña tienda de recuerdos.

Sinagoga Alta en el Barrio judío de Praga.

Sinagoga Maisel

Construida a finales del siglo XVI la sinagoga fue víctima del incendio de 1689, en ese momento fue reconstruida en estilo barroco y a finales del siglo XIX ha sido remodelada en estilo neogótico. Desde 1960 contiene una gran colección de objetos judíos: libros, objetos decorativos, telas, plata, etc.

Sinagoga Maisel en el Barrio judío de Praga.

Sinagoga Klausen

Construida en 1694, alberga en su interior una gran colección de textos hebreos y, al igual que la sinagoga Pinkas, aquí también hay una gran colección de dibujos hechos por niños que estuvieron en el campo de concentración, y estaban clasificados por temas, como por ejemplo, la vida en los barracones, la vida en el gueto, la tierra prometida, etc. Es muy impresionante. Esta sinagoga está en la salida del Cementerio Judío.

Interior de la Sinagoga Klausen en el Barrio judío de Praga.

Cementerio judío

Horario desde noviembre hasta marzo: de 9:00 a 16:30 horas. Sábados cerrado.

Situado en el barrio judío, este famoso y antiguo cementerio nos sorprenderá. Se estima que hay más de 100.000 cuerpos enterrados.

El Antiguo Cementerio Judío de Praga es un lugar sobrecogedor que tiene su propia historia. Durante más de 300 años fue el único lugar donde estaba permitido enterrar a los judíos en Praga.

Se creó en 1439 (así data la primera lápida de Avigdor Karo) y, aunque fue creciendo a lo largo de los años, no se extendió todo lo debido y actualmente se puede apreciar todo su aspecto intacto. Debido a la falta de espacio los cuerpos se enterraban unos encima de otros (llegando a más de 10 apilados). A día de hoy se pueden ver más de 12.000 lápidas. Nos impresionó mucho porque en las fotos que habíamos visto por internet parecía que había pocas lápidas pero es una extensión muy amplia y puedes caminar por la zona y estar un buen rato andando por los caminos del cementerio.

Cementerio judío de Praga.

Sinagoga Vieja-Nueva

Esta sinagoga es la más antigua de Europa aún en funcionamiento y constituye uno de los primeros edificios góticos de Praga. Fue construida en 1270. La entrada de esta sinagoga debe comprarse por separado, ya que no está incluida con las otras. Aquí vimos todos los judíos ortodoxos, nos pareció que era la de “ellos”, no la de los turistas. Nosotros no entramos.

Sinagoga Vieja-Nueva del Barrio judío de Praga.

Y ya empezó a nevar de nuevo así que rematamos las compras de souvenirs: 5 imanes costaron 150 coronas y una bola de nieve, que las colecciono, por 200 coronas. Recogimos el equipaje que nos guardaban en el alojamiento y cogimos un taxi Bolt, que es como Cabify, en Sudáfrica también había… y nos costó 13€, una tercera parte de lo que nos costó el taxi de la ida. Además llegamos super rápido.

En el aeropuerto encontramos un poco de cola en el control de seguridad, revisan mucho más que en Barcelona, y el vuelo salió a la hora prevista, a las 14.50h. Ha sido una escapada muy cortita pero bien aprovechada!!