🚕 Cambio de hotel y llegada a Taejongdae

El día comenzó con tranquilidad, ya que el tren turístico del Parque Natural de Taejongdae no empezaba hasta las 9:30 h. La previsión meteorológica indicaba lluvia al mediodía, pero justo al salir del hotel empezó a llover. Para evitar cargar con el equipaje bajo la lluvia, optamos por tomar un taxi hasta el nuevo hotel en Nampo (7.000 wones). Dejamos las maletas en el vestíbulo, ya que el check-in no era hasta las 16:00 h.

Desde allí, tomamos el autobús 8 hasta la última parada en Taejongdae (trayecto de 45 minutos). Caminamos cinco minutos hasta la entrada del parque, donde nos informaron que el tren turístico no funcionaba por el suelo resbaladizo debido a la lluvia.

Tenía mucha ilusión por visitar el faro, se puede entrar dentro, pero el camino era de 40 minutos de ida y otros 40 de vuelta, y con la niebla y el cielo nublado, decidimos no hacerlo.

🚡Busan Air Cruise

El siguiente destino era el teleférico Busan Air Cruise, que lleva a un mirador sobre el mar y a un puente colgante. Desde arriba vimos que también hay una carretera y un camino desde la playa de Songdo, por donde quizás se podía acceder, aunque luego comprobamos que estaba cerrado.

Primero visitamos el mirador sobre el mar y después fuimos al teleférico. Hay dos tipos de cabinas: normales (17.000 wones ida y vuelta) y de suelo de cristal (22.000 wones). El trayecto dura unos 10 minutos y las vistas son espectaculares.

En el mirador, el puente colgante estaba cerrado por fuertes vientos, pero la plaza estaba llena de figuras divertidas (Drácula, dinosaurios animados, personajes). Aprovechamos para hacer muchas fotos. Aunque no pudimos cruzar el puente, el paisaje era impresionante con el viento y el mar de fondo.

En la parte superior del teleférico hay una zona cubierta con mesas tipo picnic, puestos de comida y bebida, y un ambiente relajado. Comimos algo rápido: una salchicha y un pincho de pollo, todo muy fluido y sin colas.

Al bajar, intentamos explorar el camino de madera que recordaba al sendero Igidae, pero estaba cerrado. Desde arriba se veía gente caminando, quizás trabajadores. El sendero parecía llevar hasta la base del funicular, donde hay ascensores para subir a la zona alta.

🏖️ Playa de Songdo: baño y relax

Después, fuimos a la playa de Songdo, que nos encantó por ser más recogida y pintoresca que otras como Gwangalli. Tiene un mirador, un paseo agradable y esculturas en el agua (ballena, tortuga, figuras curiosas).

Decidimos darnos un baño. Las duchas no son gratuitas: hay casetas de pago (500 wones) y duchas comunitarias separadas por sexo, que utilizamos. Alquilamos una taquilla por 2.100 wones para dejar nuestras cosas y cambiarnos. Fue toda una aventura, ya que aquí la gente se protege mucho del sol y nos miraban con atención al entrar al agua sin camiseta. El baño fue muy agradable y refrescante.

Tras un rato en el agua y algunas fotos, nos duchamos de nuevo (pagando otros 2.100 wones).

🌇Tarde en Gamcheon Culture Village

Después de la ducha, cerca de las cinco de la tarde, decidimos adelantar la visita al barrio de Gamcheon, prevista para la mañana siguiente. Tomamos un taxi desde la playa hasta la entrada del barrio (unos 4 euros con tarjeta).

Comenzamos a subir por el camino principal y llegamos hasta el gimnasio con la famosa estatua del Principito, pero justo eran las 18:01 h y ya estaba cerrado. Aun así, hicimos fotos desde fuera. Seguimos explorando el barrio, bajando por calles decoradas con murales, dibujos y tiendas.

Estuvimos aproximadamente una hora disfrutando del ambiente tranquilo y la luz del atardecer. Muchas tiendas y puestos de comida ya estaban cerrando, pero aprovechamos para hacer muchas fotos preciosas.

Al terminar, tomamos el autobús 2-2 que pasó justo frente a la oficina de turismo y enseguida estábamos de vuelta en Nampo.

🍽️ Cena en el mercado de Jagalchi y paseo nocturno

Para cerrar el día, fuimos caminando hasta el mercado de pescado de Jagalchi, justo en la calle de abajo del hotel. Cenamos marisco y pescado a la plancha: gambas tipo langostino (20.000 wones), pescado a la plancha (20.000 wones) y algunos platos pequeños. No somos de pescado crudo. La cena costó 65.000 wones en total y pudimos pagar con tarjeta. Muy buena calidad y atención.

Después de cenar, dimos un paseo por la zona iluminada junto al mar e intentamos subir a la terraza del centro comercial Lotte (mirador gratuito), pero ya estaba cerrado (más de las 21h). Mañana volveremos de día. Aun así, disfrutamos de las vistas nocturnas por la zona, antes de regresar al hotel.

Próximamente dia 8: Centro de Busan y bus a Jeonju